Los autores de ‘King Corp’, David Fernández y José María Olmo, continúan haciendo de las suyas. Tal vez es el libro que más polémica está causando de los últimos años. En sus páginas se habla de los secretos más ocultos de Juan Carlos I, los que todavía no se han desvelado. La supuesta hija ilegítima del exmonarca, Alejandra de Rojas, algo que ambos protagonistas de esta historia han negado dejando en ridículo a los periodistas, tal vez por ello ha decidido atacarle con otras informaciones que pueden hacerle el mismo daño o más.

Ya hablaron del momento en el que le estafó 20 millones de euros una persona de su máxima confianza, a lo largo de los capítulos se hace referencia al dinero de dudosa procedencia del que ha vivido toda su vida el exmonarca, sus hijas y sus nietos. Felipe VI, Leonor y Sofía renunciaron desde hace una década a cualquier tipo de dinero relacionado con Juan Carlos I, justamente desde su abdicación en 2014, momento en el que el actual rey renunció a la herencia de su padre.

infanta elena con juan carlos efe

Juan Carlos I ha pagado todos los gastos y caprichos de sus hijas, especialmente de Elena, y de sus nietos, haciendo hincapié en Victoria Federica y Froilán. A los cuatro hijos de la infanta Cristina les ha pagado los estudios y sus pisos de alquiler, pero a los nietos de su hija mayor, los más polémicos,  les pagaba hasta el VTC para sus desplazamientos por la capital cuando acudían a las fiestas.

La infanta Elena se aprovechó del sueldo de Juan Carlos I para pagar los caprichos de sus hijos 

"La infanta Elena creció en un sistema instaurado por su padre que durante cinco décadas garantizó discretamente fondos ilícitos ilimitados, 24 horas al día, siete días a la semana, a todos los inquilinos de la Zarzuela", reza el libro, editado por Libros del K.O.

En aquella época, Victoria Federica se centró en la hípica y la infanta Elena le compró dos caballos de competición, supuestamente pagos por Juan Carlos I. "Desde fuera parecía que vivieran en las estrecheces de un funcionario público. En privado, se codeaban con algunas de las mayores fortunas del planeta gracias a millones y millones de euros de dinero de origen opaco. ¿Para qué iba la infanta Elena a gastar su sueldo de Mapfre en los caballos si tenían recursos infinitos para pagarlos?”, puede leerse en el libro.

Infanta Elena EFE

La infanta Elena siempre ha sido muy discreta con su vida privada, pero además de los pagos de Juan Carlos tiene un trabajo. Es directora de Proyectos Sociales en la Fundación Mapfre, donde trabaja desde el verano de 2008. Últimamente se la ve más tiempo en casa o viajando para ver a su padre gracias al teletrabajo. Le ha permitido un mayor movimiento.

“Poco después, la infanta Elena se hizo con un segundo caballo de competición llamado Magali, que quedó a cargo de la hípica Nueva Cartuja, situada al norte de Madrid”. En aquellos meses, “la nieta del rey comenzó a participar con mayor asiduidad en competición de salto por toda España”. “Desde fuera parecía que vivieran en las estrecheces de un funcionario público. En privado, se codeaban con algunas de las mayores fortunas del planeta gracias a millones y millones de euros de dinero de origen opaco. ¿Para qué iba la infanta Elena a gastar su sueldo de Mapfre en los caballos si tenían recursos infinitos para pagarlos?”.