La discreción ha caracterizado siempre a la infanta Elena. La primogénita de los reyes eméritos ha vivido una vida acomodada como buena Borbón, pero no ha dado demasiado titulares más allá de su -casi invisible- divorcio. Con la llegada al trono de Felipe VI, dejó de formar parte de la familia real, diciendo adiós a su agenda oficial.
Este miércoles cumple 54 años, y parece que volverá a soplar las velas lejos de la Zarzuela. Centrada en su trabajo en la fundación Mapfre, en la que dirige el departamento de proyectos sociales, acudirá a trabajar como un día cualquiera, pero se espera que lo celebre en la intimidad con Victoria Federica y el travieso Froilán.
El hijo de la infanta Elena ocupa un titular tras otro, hablándose más de él que de cualquier otro miembro de la familia. Muchos especulan sobre cómo será la relación entre ambos, ¿le castigará a menudo?
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Sea como sea, lo que parece evidente es que Elena se encuentra desde hace unos años entre la espada y la pared. Ella sería quien peor lo ha pasado ante la ruptura familiar que han sufrido a raíz del estallido del caso Nóos y las infidelidades del rey Juan Carlos I. Muchos aseguran que Elena ha sido el nexo de unión entre una banda y otra, defendiendo a los Urdangarin y también su padre, a quien estaría muy unida. No como con Letizia, ya que mucho se ha hablado de la presunta mala relación que tendrían.
EFE
Ahora bien, la Reina no puede quejarse demasiado de la infanta. De Elena no han trascendido demasiado polémicas, tiene una vida aparentemente lejos de los lujos y no da que hablar. Sin embargo, como decíamos no se espera que la familia se reúna para celebrar su cumpleaños.
Sí que lo harán este fin de semana, por eso, al haberse filtrado que los reyes Felipe y Letizia la invitarán a ella y los niños para pasar juntos la nochebuena. ¿Cómo irá la reunión familiar?