La infanta Elena es la más Borbón de toda la familia, fiel defensora de la monarquía y del reinado de Juan Carlos I. La hija del emérito también culpa a Letizia de todos los males de la familia. De hecho, por culpa de ella está la familia fracturada en dos. Desde que ella está en el poder, la familia al completo no se ha vuelto a reunir públicamente. Ni una fotografía en las escaleras de Zarzuela ni en las de Marivent. Y es que la actual monarca está convencida de que los Borbón son los culpables del declive de la corona y está volcada en preservar su reinado y garantizar el futuro de Leonor.
En una pérdida de poder de Letizia, los Borbón han conseguido reunirse al completo en varias ocasiones, como en el cumpleaños de la infanta Elena, aunque con dos claras ausencias, Leonor y Sofía. Las hijas de Letizia no se han reunido con sus tías y sus primos en ninguna ocasión. Su madre no quiere que su imagen se vea dañada. Le ha costado muchos años alejarse del apellido Borbón, y es que ya nadie relaciona a la princesa con Juan Carlos, sino con Felipe VI y una nueva era. Ni tan siquiera en el día de su mayoría de edad dejó que la familia se acercase a Leonor y se hiciesen fotografías juntos.
La infanta Elena ayuda a Juan Carlos a ver a Leonor en secreto
Uno de los que menos la ha visto en estos últimos años ha sido Juan Carlos, y es que ha estado castigado en el exilio por su comportamiento. Felipe VI ha conseguido que sus viajes ya no representen ningún interés mediático, por este motivo sus estancias en España son cada vez más frecuentes y prolongadas, algo que no es del agrado de Letizia, pero mucho de la infanta Elena, quien le acompaña en todos sus viajes.
La infanta Elena siempre se desplaza a Sanxenxo cuando está Juan Carlos. Ambos duermen en la casa de Pedro Campos, y es ella quien le acompaña en las regatas. Precisamente, también es ella quien ha enfadado y mucho a Letizia, y es que la hermana de Felipe VI está convenciendo a su padre para que se reúna en secreto con Leonor. La princesa no pone ningún problema, pero sabe perfectamente que su madre no quiere que vea al abuelo.
Todos están en contra de Letizia. Ahora Juan Carlos tiene mucho más fácil ver a Leonor en Marín, a escasos kilómetros de Sanxenxo, sin que la reina se percate de nada.