La infanta Elena es la más Borbón de todos. Fiel defensora de Juan Carlos I y de su reinado, motivo que le ha llevado a pelearse en más de una ocasión con su hermano Felipe, por obligarle a abdicar, y exiliarle a los Emiratos Árabes, la mayor humillación pública que se le podría hacer a un rey. Todo orquestado por Letizia, la gran enemiga del emérito. Sin embargo, años atrás, Elena ha tenido muy buena relación con su hermano pequeño, también la infanta Cristina, aunque es en esta última en la que más confiaba Felipe VI. Es a quien le contaba que había conocido a otra mujer para ser la futura reina porque todas eran plebeyas e Iñaki era plebeyo.
Como ya os contamos, Juan Carlos y Sofía se casaron por obligación, y si lo hubiesen podido evitar no lo hubiesen hecho. Tuvieron solo relaciones íntimas para dar a luz al varón que heredaría al trono en el futuro, pero tuvieron muy mala suerte. El primer embarazo era un niño, pero la reina Sofía abortó. Luego vinieron dos niñas, Elena, y después Cristina. El siguiente fue Felipe, aunque el emérito ya no estaba dispuesto a engendrarlo.
El mayor secreto de Felipe VI custodiado por la infanta Elena
Cuando Felipe VI cumplió la mayoría de edad, antes de marcharse a la formación militar obligatoria para cualquier Jefe de Estado, el príncipe confesó a sus dos hermanas mayores que realmente le gustaban los hombres. Así lo destapa la periodista Laura Rodríguez basándose en el libro de Joaquín Abad. Según la Youtuber, Felipe se casó con Letizia para que no se descubriesen sus verdaderos gustos sexuales.
Este secreto ha sido guardado bajo llave en Zarzuela. Nunca ha salido de esas cuatro paredes, y es que hubiese supuesto un escándalo. A ningún Borbón le gustan los hombres, para el emérito, o más para su abuelo, Juan de Borbón, hubiese sido una deshonra de rey. Hubiese estado muy mal visto en la monarquía de antaño un rey con otro rey, o simplemente un rey soltero, inadmisible. Por ello pactó con Letizia casarse y formar una familia, aunque ella podría continuar con su vida alejada del foco, según Maica Vasco. La infanta Elena guarda este secreto desde hace 38 años, aunque en estos últimos años ha estado por revelarlo, por el daño que le ha hecho Felipe a la corona.