Son muchos los famosos que se encuentran en la lista de morosos, también algunos miembros de Casa Real. No obstante, si la deuda no es superior al millón de euros no aparece. En 2012, la infanta Elena estaba en deuda con la Agencia Tributaria. La hija de Juan Carlos I debió 510 euros a Hacienda por no hacer frente a las deudas generadas por una empresa, Global Cinoscéfalos, creada en julio de 2007, de la que es administradora única y que ella creía haber disuelto. Ocho meses después de su creación, la sociedad cesó su actividad, pero su cierre no se ratificó debidamente y continuó activa en el Registro Mercantil con Elena de Borbón como propietaria al 100% del capital, fijado en 3.600 euros, tal y como publicó el diario CincoDías.
La hermana de Felipe VI creó esta empresa junto a los hermanos Carlos y Javier García Revenga cuando se divorció de Jaime de Marichalar. Su propiedad se traspasó a la infanta Elena ese mismo año. Como de costumbre, Casa Real optó por el silencio ante esta situación. Solo dijo que la creación de esta sociedad era de carácter personal y privado. Pero unos días más tarde se liquidó la empresa. No obstante, la disolución no se llevó a cabo de forma correcto y la Agencia Tributaria se puso en contacto con la interesada sin suerte.
El error de los abogados de la infanta Elena
"No porque no quisiera atender sus obligaciones fiscales, sino porque todo, aparentemente, había quedado resuelto y cerrado en 2007", aseguraba el portavoz de la Casa Real, Javier Ayuso, al citado medio. "La sociedad nunca se liquidó. Cometimos un error. Los abogados de la Infanta Elena dieron por hecho que el departamento jurídico de la Casa Real se encargaría de los trámites legales pertinentes para proceder a la liquidación formal, legal y efectiva de la compañía, y este departamento pensó que quienes se encargarían de hacerlo eran los asesores legales de la Infanta Elena. Pero nadie lo hizo", añade Ayuso.
Al no poder contactar personalmente con la infanta Elena, la Agencia Tributaria publicó en el tablón de anuncios la notificación. "Es un trámite legal -explica el portavoz de la Agencia Tributaria a dicho diario económico-, que da a los interesados a los que no se ha podido localizar por las vías normales de notificación por carta, veinte días hábiles para presentarse en Hacienda y pagar las deudas o recurrirlas. Pasado ese plazo, si no hay comparecencias, se pone en marcha el procedimiento de embargo".
Motivo por el que le empresa se endeudó. Arrastró tres deudas de 120 euros y otras 3 de 50 euros, debido a que “no se ha remitido información sobre sus cuentas y sobre su actividad”, tal y como explica el portavoz de Zarzuela. Fue Casa Real quien se puso en contacto con Hacienda para abonar la deuda y sacar a la infanta Elena de la lista de morosos.