La infanta Elena ha sufrido muchos quebraderos de cabeza con sus hijos. Se comportaban como muchos adolescentes, pero ellos no eran niños normales, pertenecían a la corona y no podían ponerse en el foco mediático porque cada una de sus acciones era un escándalo. Cuando Juan Carlos y Sofía eran reyes no pasaba absolutamente nada, sin embargo, cuando le tocó el turno a Felipe y Letizia la historia cambió. Dieron varios toques de atención a la hermana del rey, algo que ella veía como una humillación constante, siempre se marchaba de Zarzuela cabizbaja y avergonzada, hasta que un día decidieron tomar medidas muy serias, especialmente con Froilán.
Hace algo más de un año Froilán participó en una pelea con arma blanca a las puertas de una discoteca la madrugada de un 25 de diciembre en el barrio de Salamanca, uno de los más exclusivos del centro de Madrid. Un mes más tarde fue desalojado de un after ilegal con licencia de sauna que superaba el aforo permitido, y curiosamente en la habitación en la que se encontraba el joven con unos amigos aparecieron sustancias estupefacientes. Este escándalo colmó la paciencia de los monarcas y Juan Carlos se encargó de su nieto favorito. Ahora vive con él en Abu Dabi.
Victoria Federica es la última esperanza de la infanta Elena
Victoria Federica también puso en jaque a la corona. Ella tiene una actitud más desafiadora. La joven encontró su vocación. Quiso dedicarse a las redes sociales y su padre, Jaime de Marichalar, le ha ayudado a ello. Acumula cientos de miles de seguidores y recibe muchas ofertas publicitarias a pesar de su elevado caché. Ahora graba su participación en ‘El Desafío’, su primera vez en televisión, y se habla de su participación en una serie.
La infanta Elena está muy orgullosa del camino de su hija, mucho más centrada. A Casa Real no le gusta que Victoria Federica se exponga tanto públicamente, pero su madre está encantada. Ha ido a verla a los ensayos de ‘El Desafío’ y promete sorprender. Esto también puede ayudar a que la imagen de ella cambie por completo.
Para estar contento a la infanta Elena solo le falta buscar una pareja decente a sus hijos, alguien de clase alta, de familia poderosa y millonaria. Un aristócrata o alguien de la realeza, y no alguien como las últimas parejas que han tenido sus hijos. Victoria Federica salió durante tres años con Jorge Bárcenas, pero parece que ahora mismo no quiere una pareja estable, va conociendo a otros chicos.