La infanta Elena se distancia aún más de Felipe VI. En estos últimos meses su hermano se ha puesto muy serio con ella por el comportamiento de Froilán y Victoria Federica, pero en esta ocasión ha sido ella quién le ha llamado de forma urgente para criticarle su actitud. Casa Real se desvincula nuevamente de las polémicas que rodean al resto de la familia del rey. Juan Carlos ha dañado la monarquía y eso no se le perdona. O por lo menos es Letizia quién no quiere perdonarle. Para el exmonarca es la mujer de su hijo quien está detrás de todos sus males.
Esta semana Juan Carlos se ha puesto de nuevo en el foco mediático y no por su actitud. En su visita a España ha sido totalmente discreto, como prometió a Felipe VI, pero los periodistas David Fernández y José María Olmo han publicado un nuevo libro sobre sus secretos más ocultos y no han podido tener mayor propaganda. En las primeras páginas hablan de una supuesta cuarta hija ilegítima del emérito. Según éstos, la modelo habría nacido fruto de la presunta relación de Charo Palacios con Juan Carlos I a finales de los años 70.
Sin duda, este episodio deja en muy mal lugar a la reina Sofía. Una vez más ha quedado totalmente humillada y se recuerda su mote, “la mujer cornuda”. La emérita es la única que guarda absoluto silencio y se desvincula aún más de Juan Carlos I. La infanta Elena ha mostrado la preocupación por sus padres, mientras que Felipe no dice absolutamente nada. Precisamente, su hermana se queja al rey de su nula participación en este asunto. Como monarca le pide que emita un comunicado zanjando todos los rumores.
Juan Carlos I ha negado que Alejandra de Rojas sea su hija y que haya mantenido relaciones íntimas con Charo Palacios. Por otro lado, superada por la situación, la modelo también ha comunicado que tomará acciones legales contra todos aquellos medios de comunicación que publiquen informaciones falsas sobre este asunto.
La infanta Elena preocupada por la imagen de sus padres
La infanta Elena llamó inmediatamente a su padre para conocer de primera mano como se encuentra el exmonarca ante esta situación. "A don Juan Carlos no le preocupa lo que digan de él, no ha hecho nada malo. Está centrado en su tranquilidad y no perjudicar la imagen de su hijo como rey”, explica ‘Monarquía Digital’.
“Habrá hecho cosas bien y mal, como todo el mundo, pero la realidad es que no tiene ninguna causa judicial abierta, y sin embargo se le trata como a un criminal”, asegura una fuente muy cercana al emérito.
Las infantas Elena y Cristina son las únicas que apoyan a Juan Carlos públicamente. También a la reina Sofía. La hermana mayor de Felipe le llamó para que protegiese la figura de su madre que ha quedado humillada. Casa Real guarda silencio.