Este fin de semana, la Casa Real tiene un nuevo compromiso personal, que ha captado la atención de todos. La familia Borbón y de Grecia podría reunirse en la tan esperada boda de Victoria López-Quesada y Enrique Moreno de la Cova, que se celebrará el sábado 31 de agosto en Madrid. La asistencia de las infantas Elena y Cristina, acompañadas por Victoria Federica y algunos de los hijos de Urdangarin, ya está confirmada. Además, se espera que Felipe VI, quien no tiene compromisos institucionales en su agenda para este fin de semana, también esté presente en la ceremonia, ya que es el padrino de la novia. Asimismo, los reyes eméritos Juan Carlos y Sofía habrían sido invitados, aunque su participación en el evento aún no se ha confirmado.
Por otro lado, la reina Letizia, quien también recibió una invitación, se ha visto en la necesidad de disculparse con la familia por su enésima ausencia en un evento familiar. Según se dice, fue el propio Felipe VI quien le sugirió que ofreciera disculpas por este nuevo desplante. Letizia, quien ha estado evitando asistir a esta boda, que ya ha sido aplazada en tres ocasiones, ha encontrado una vez más una excusa perfecta. En esta ocasión, la madre de Leonor y Sofía pasará el fin de semana en París, apoyando a los deportistas paralímpicos, lo que le permitirá evitar el evento.
Letizia pone cualquier excusa para no coincidir con la familia de Felipe VI
Desde su llegada a la familia real en 2003, la relación de Letizia con los Borbón ha sido tensa. La reina ha mostrado una evidente distancia hacia la familia de su esposo y ha dejado claro que no desea ser asociada con ese apellido, especialmente desde que Felipe VI asumió el trono. Cada vez que se encuentra con los Borbón, se siente incómoda y hace lo posible por retirarse rápidamente. Esta actitud ha generado enfado en el rey, ya que todos en la familia saben que su asistencia a los Juegos Paralímpicos es simplemente una excusa para ausentarse de la boda, a la cual habría tenido que asistir de no ser por este compromiso en París.
Un episodio similar ocurrió el pasado 15 de agosto, cuando falleció Juan Gómez-Acebo. Letizia decidió no asistir al funeral, mientras que Felipe VI no pudo hacerlo debido a un viaje de Estado a la República Dominicana. En consecuencia, la familia optó por posponer la misa funeral para mediados de septiembre. Letizia, quien estaba de vacaciones, no estaba dispuesta a interrumpirlas para ir a Palma de Mallorca y despedir a Juan Gómez-Acebo. Tampoco mantiene una buena relación con los hijos de la infanta Pilar ni con los de la infanta Margarita.
Letizia no tiene ninguna relación con las infantas Elena y Cristina, aunque en los últimos meses haya parecido que se ha producido un acercamiento entre ellas. La reina fue obligada al cumpleaños de la madre de Froilán porque no le quedó más remedio. Las declaraciones de Jaime del Burgo habían hecho que perdiese poder en la corona. Y el encuentro que se vio de la madre de Pablo en Marivent con Letizia solo fue de unos 30 minutos, la reina le obligó a marcharse. La relación es nula, y las pruebas son evidentes.