La infanta Elena, durante cuatro años, fue la heredera del trono de España. Ese es el tiempo que pasó entre su nacimiento y el de Felipe. La llegada de un varón a la familia descartó la opción de que la primera hija de los reyes eméritos Juan Carlos I y Sofía terminara siendo reina.
Así las cosas, y aunque en su padre tiene un buen colchón económico, Elena ha tenido que buscarse la vida para tener un plato en la mesa y llegar a fin de mes. Es cierto que el dinero de Juan Carlos le ha ayudado en muchas ocasiones. Pero Elena ha preferido ser completamente autónoma, sin depender específicamente de la fortuna del emérito. Y lo cierto es que no le ha ido mal.
La infanta Elena tiene un sueldo mensual de cinco cifras y anual de seis
La infanta Elena, cuya debilidad son las causas perdidas, trabaja en la Fundación Mapfre. Allí desempeña el papel de directora de proyectos, siendo una de las máximas autoridades de la institución. Y por ello cobra un sueldo nada desdeñable.
Según reveló Pilar Eyre en uno de sus libros, Elena cobra 300.000 euros al año. Es decir, tiene una nómina mensual de 25.000 euros al mes. Un dinero que, además, tributa en España, a diferencia de su padre. Por lo menos ha demostrado más amor a la patria que el emérito.
Juan Carlos paga los gastos de Victoria y Froilán
Un dinero que, además, se guarda para ella en su totalidad. La infanta está libre de cargas, teniendo en cuenta que los gastos importantes relacionados con sus hijos, Victoria Federica y Froilán, corren a cargo del ex Jefe de Estado. Es el abuelo el que paga la fiesta de los jóvenes de la casa. Durante años les pagó la formación académica. Ahora, a falta de ello, paga los caprichos de Victoria y Froilán, además de haber enchufado a su nieto en una petrolera de los Emiratos Árabes.