La relación de Letizia y la infanta Elena eso una de las peores. La hija de la reina Sofía siempre ha sido una fiel defensora de la corona y del reinado de Juan Carlos, por ello su enemistad con la mujer de su hermana, la culpa de todos los males de su familia. Cree que el exilio de su progenitor fue demasiado humillante. Ahora mismo se encuentra a miles de kilómetros de la familia a sus 86 años de edad.
Letizia nunca fue bien recibida en la familia, especialmente por Juan Carlos y la infanta Elena. Los Borbón le hicieron el vacío y se sintió completamente sola y humillada por el simple hecho de ser una plebeya. Ellos siempre le hicieron saber que estaban por encima de los ciudadanos de a pie. Se reían de ella. La madre de Leonor y Sofía prometió que se vengaría cuando fuese reina. No pensaba renunciar a Felipe porque era una mujer muy ambiciosa y poderosa. En 2014, tras las fechorías de Juan Carlos y el caso Nóos, el rey heredó el trono con la abdicación de su padre, y Letizia ejerció el papel de reina consorte, aunque nunca lo aceptó. Ella misma tomó todas las decisiones, y una de ellas era eliminar a los Borbón. Les retiró todas las funciones institucionales y el sueldo que percibían por parte de los Presupuestos Generales del Estado.
Las reglas no escritas de Letizia en Zarzuela
Durante muchos años, Letizia se encargó personalmente de que ningún Borbón pisase el recinto de Zarzuela, aunque en palacio viviese la reina Sofía e Irene de Grecia. Toda la familia tenía que pedir permiso para acceder a la casa, como si fuesen unos extraños. En los últimos meses, los Borbón han recuperado mucho terreno. Son los auténticos protagonistas. La campaña de desprestigio contra la reina ha surtido efecto. Ya no es nadie. Ha perdido todo el control y el poder.
Fuentes cercanas a Zarzuela recuerdan las veces que han pisado palacio y como había una ley no escrita en la que ninguno podía acceder a las estancias de los reyes, y Letizia había delimitado un lavabo para todos los invitados y familiares Borbón. No quería que nadie fuese a los mismos baños que ella. Es una persona muy escrupulosa y le daba demasiado asco. La infanta Elena es una de las que siempre ha tenido prohibido utilizar el baño cuando va a Zarzuela. Tiene que ir al de invitados, y sino mejor aguantarse si no quiere otra pelea.