La infanta Sofía ha sido la gran protagonista de la Familia Real por la ausencia de la princesa Leonor en los actos del 12 de octubre. La hija pequeña de Letizia escogió zapato plano, vestido azul y pelo largo que le restaba glamour y le otorgaba naturalidad. Es la hija más popular de los reyes. Sofía será durante los dos años que la hermana mayor y heredera viva en Gales el gran icono de Zarzuela. Aunque la enseñan con cuentagotas, Sofía brilla cuando aparece: más alta, desenvuelta y extrovertida que Leonor. Destaca tanto que la revista Hola le dedica la portada y un artículo sobre su vida.
El titular es royal: "La infanta Sofía, nueva estrella de palacio, en la fiesta nacional". La noticia es muy vieja, las fotos son de hace más de una semana y las tiene todo el mundo, por tanto había que ingeniarse un texto que diera sentido a convertir a Sofía en portada. Hola lo consigue con revelaciones poco escritas de la adolescente de 15 años. Y hay una que demuestra la extraordinaria personalidad de la chica. Sofía no ha querido pasar por el mismo aro que sí aceptó Leonor. Sofía se ha negado a hacerse los agujeros de las orejas.
Mientras Leonor, por feminidad, por princesa, por presión de Letizia o porque le da la real gana (nunca mejor dicho) aceptó mutilarse los lóbulos de las orejas y hacerse agujeros para los pendientes, la infanta Sofía nunca lo ha aceptado y ahora con 15 años sigue negándose: "A diferencia de su hermana a su misma edad, la infanta no ha dado el paso de los tacones. Con su altura, no los necesita. Y tampoco ha dado el paso de llevar pendientes, se resiste a hacerse los agujeros, a diferencia de la princesa, que tomó la decisión con ocho años. Es su otro toque personal". La noticia es que Letizia nunca ha impuesto este gesto de agujerearse la cara a las niñas, ellas han decidido. Y haciendo uso de esta libertad lo más definitorio de cada una es que con sólo 8 años Leonor dijo que sí y Sofía, alejándose de la princesa, dijo que no. Ella como los chicos, o como las chicas sin pendientes. Tal cual.
Dos hermanas que con solo 15 y 17 años ya tienen más personalidad, conocimientos y buena imagen que sus dos tías, las infantas Cristina y Elena, siempre soberbias, clasistas, maleducadas y zánganas. La mejor postal de los Borbones, la que todavía conserva cierta pureza, son la princesa y la infanta. Y puestos a escoger, Sofía y su seguridad en ella misma con sólo 15 años. Nada de agujeros. Si alguien royal se quiere mutilar, que utilice guillotina.