Leonor y Sofía han crecido juntas. Siempre han pasado todo el tiempo unidas y se las ha protegido. Aunque la princesa de Asturias se convertirá en la futura reina de España, desde que eran dos bebés, Felipe y Letizia no han querido hacer distinciones entre las niñas. Las dos recibieron la misma educación, las mismas clases de protocolo y son tratadas por igual. Se han apoyado a la una a la otra en momentos difíciles, y es que pertenecer a la monarquía española no es fácil. Aunque los reyes han hecho todo lo posible para que sea así, pocas veces se han sentido como sus compañeros de clase. Siempre han ido acompañadas de sus escoltas y nunca han tenido libertad e independencia para hacer lo que ellas deseen en cada momento. Es ahora que han volado de Zarzuela cuando pueden parecerse un poco más a sus compañeros.
Con tan solo 16 años, cuando Sofía tenía 14, Leonor se marchó a Gales para estudiar bachillerato internacional en el prestigioso internado UWC Atlantic College de Gales, donde estudian los hijos de las familias más pudientes. Allí la princesa se enamoró por primera vez. Es Leonor quien le contó a Sofía como era esa experiencia, y la infanta pidió a Letizia y Felipe estudiar en la misma escuela.
Dos años después, Sofía inició los mismos estudios que su hermana en Gales, pero a la vez Leonor se marchaba a Zaragoza para iniciar la formación militar obligatoria para cualquier Jefe de Estado. Durará tres años. En caso de que se obligue a la infanta realizarla también, las hermanas no se volverán a ver en Zarzuela hasta dentro de cuatro años.
La infanta Sofía no tiene relación con Leonor
Esta distancia ha provocado un distanciamiento entre ellas. Estaban muy unidas, pero en la etapa más decisiva de la vida de cualquier persona, la adolescencia, han vivido separadas. No han podido compartir juntas el primer amor, la primera fiesta, sus problemas, ni sus vivencias. No han podido ser el apoyo la una de la otra en los momentos buenos, pero tampoco en los momentos malos, que aunque sean hijas de los reyes también son humanas.
Fuentes cercanas a la familia real aseguran que observan un importante distanciamiento entre las hermanas cuando coinciden obligatoriamente en algunos actos institucionales o familiares, como por ejemplo la pasada Semana Santa en Madrid. La familia dio una vuelta por el centro de Madrid, pero Sofía se distanció de Leonor y se agarró al brazo de su padre, mientras que la princesa conversaba unos pasos más adelante con su madre, Letizia. La comunicación entre ellas se ha vuelto prácticamente inexistente.