Felipe y Letizia repitieron la estrategia del año pasado en Semana Santa y se dejaron ver públicamente con sus dos hijas en Madrid. En 2023 eligieron la Pasión Viviente en Chinchón, y este año se han quedado en el centro, con la intención de ver una de sus procesiones. Los reyes han sido muy criticados por no defender los actos religiosos. A principios de semana, los monarcas viajaron hasta Zaragoza para recoger a su hija y que volviese acompañada a Madrid. La infanta Sofía no llegó hasta los días festivos. Ahora disfruta de unas semanas de descanso marcadas en el calendario escolar para dar por finalizado en breve al primer año de bachillerato internacional.
Los reyes quisieron que sus dos hijas tuviesen las mismas oportunidades. Leonor fue la primera en abandonar Zarzuela para estudiar bachillerato internacional en el UWC Atlantic College de Gales, un prestigioso internado en el que la familia real española, especialmente la reina Sofía, tiene muy buenas relaciones. La princesa disfrutó de libertad e independencia, como el resto de adolescentes. Leonor le explicaba a Sofía cómo era su experiencia en el internado y ella también quería vivirla. Letizia y Felipe creyeron que era lo más conveniente.
La dirección del centro envía un aviso a Sofía
Son los reyes lo que pagan la educación de ambas. No quisieron que Juan Carlos pusiese un solo euro tras sus polémicas. Leonor ha sacado unas notas excelentes. Sin embargo, Sofía no tanto. Faltan tan solo dos meses para que finalicen las clases en Gales y su media es muy baja. Este año a la infanta le ha tocado estudiar con muchos compañeros españoles, la mayoría de ellos de Madrid. Aunque desde pequeña sabe más de cinco idiomas, se lleva muy bien con sus amigo de la capital. Las costumbres son las mismas. Sofía se distrae con facilidad, y esto tampoco ayuda.
La dirección del centro ha enviado varias cartas a los reyes para compartirles el bajo rendimiento de su hija pequeña. Se le resisten todas las asignaturas de números, como matemáticas o las ciencias. Además, se distrae con mucha facilidad. No atiende a las clases, está dispersa. Encima, es una de las últimas en llegar a las clases, especialmente por las mañanas. Se le pegan las sábanas.
Sin embargo, la conducta de la infanta Sofía no es nueva en Zarzuela. Juan Carlos y Sofía tuvieron los mismos problemas con Felipe. También era un estudiante que necesitaba ayuda en algunas materias, se distraía con mucha facilidad. Necesitó profesores de apoyo. Y a la hermana de Leonor también se ha decidido darle clases de repaso. Letizia se ha enfadado con ella y le ha obligado a ponerse las pilas porque el final del primer curso está muy cerca y necesita un nota alta. La idea es que estudie en la universidad pública en Madrid, igual que hará Leonor cuando acabe la formación militar, a diferencia que la infanta podrá estudiar la carrera que más desee. Y al estudiar bachillerato internacional, no tendrán nota de corte ni deberán presentarse a la selectividad.