Para Letizia sus hijas son lo más importante, y más cuando se avecina la temida sombra de Juan Carlos I. Sus principales enemigos, el exmonarca e Iñaki Urdangarin, han regresado para hacer temblar los cimientos de Zarzuela. El emérito no avisó de su inminente viaje a Sanxenxo, aunque es algo que Felipe VI preveía. El marido de Sofía no quiere perderse las famosas regatas. No obstante, el rey le ha pedido que sea discreto, no quiere un nuevo show mediático como el del año pasado. Si no se comporta y pasa totalmente desapercibido no se valorará la posibilidad de su regreso definitivo a España, uno de los deseos de Juan Carlos. Como plan de urgencia, se le pondrán más escoltas y además se cambiará su residencia. No se hospedará en el domicilio de su amigo Pedro Campos, quien el año pasado hizo negocio con su figura.
Leonor hace más de tres años que no ve a Juan Carlos, Sofía un año
La actual reina cree que Juan Carlos perjudica a la imagen de la corona que tanto esfuerzo les ha costado mantener tras sus polémicas. Tampoco hace ningún favor al reinado de su hijo, ni al futuro de sus nietas. Desde agosto de 2020, Leonor no ve a su abuelo. El emérito se exilió en Abu Dabi y no han coincidido en ninguna de sus visitas. Ni en el funeral de la reina Isabel II, ni en el de Constantino de Grecia, tampoco en el almuerzo organizado en Zarzuela. Su hermana Sofía pudo verlo de forma discreta en el almuerzo de despido. Salió del colegio un poco antes para poder estar presente con el resto de familiares. La princesa de Asturias se encontraba en Gales y era imposible hacer este viaje para un par de horas.
La infanta Sofía solo ha visto a su abuelo una vez en estos últimos tres años. No ha coincidido con él en ningún acto público. Letizia intenta desvincularlas de la imagen del exmonarca, y prácticamente de toda la familia. Ya que tampoco se dejan ver al lado de la reina Sofía. Con sus dos hijas, la reina asesta un golpe mortal a Juan Carlos I. Deja claro que la familia de su marido solo entorpece las cosas.
Nuevamente, en esta visita de Juan Carlos, Leonor y Sofía no le verán. En el caso de la princesa de Asturias porque se encontrará estudiando en Gales, mientras que en el caso de la infanta será porque se ha prohibido al emérito visitar Madrid, y mucho más quedarse en Zarzuela, ni tan siquiera saludar. Una prohibición de Felipe VI y Pedro Sánchez. Se trataría de un castigo porque ninguno estaba de acuerdo con su visita.
"El martes 18 de abril aterrizará en Galicia, en el aeropuerto de Vigo, y el domingo, después de las regatas, partirá de nuevo para Abu Dabi”, explicó Juan Luis Galiacho. Y no es el único castigo. Juan Carlos I tampoco asistirá a la coronación de su amigo Carlos III. Esto indica que Leonor y Sofía podrían estar presentes, ya que por primera vez también han recibido la invitación.