Son días complicados en Zarzuela. Al menos, eso se puede deducir después de que Jaime del Burgo, excuñado de Letizia, decidiera hacer público el presunto idilio que tuvo con la reina a espaldas de Felipe. Un caos con la fotografía de la monarca enfundada en una pashmina virando por Internet ya borrada de la faz de la tierra. Por lo que pueda pasar.
Ojo, que no quiere decir que el exmarido de Telma Ortiz se desdiga de nada de lo que publicó previamente. "No cambio una coma de mis posts eliminados. Agradezo los mensajes de los que han entendido que tendría mis razones. No guardo rencor a los que me habéis amenazado de muerte. No me siento orgulloso. Pero la verdad es la que es. Yo reconozco a un solo rey, está en Cielo y se llama Jesús de Nazaret. Él me juzgará", dice su último tuit.
No cambio una coma de mis posts eliminados. Agradezo los mensajes de los que han entiendido que tendría mis razones. No guardo rencor a los que me habéis amenazado de muerte. No me siento orgulloso. Pero la verdad es la que es. Yo reconozco a un solo rey, está en Cielo y se llama…
— Jaime Del Burgo (@JaimeDelBurgo) December 5, 2023
La historia, sea más o menos cierta, ha coincidido temporalmente con la llegada de una de las épocas más especiales del año para la inmensa mayoría de familias. En la Casa Real, como en infinitud de medios, hacen oídos sordos al respecto y apuestan por fingir que todo está estupendamente. Lo esté o no, la vida sigue, y con motivo de las vacaciones escolares, parece que la reina podrá paliar el escándalo con algo que, imaginamos, esperaba con ansia: el fin del síndrome del nido vacío. No para siempre, pero sí el tiempo suficiente para sentirse acompañada por sus dos pilares, sus hijas Leonor y Sofía. Para el retorno a palacio de la mayor habrá que esperar un poco, puesto que todavía se encuentra en la Academia Militar de Zaragoza y, de acuerdo con la información publicada en el digital Informalia, el pasado 7 de diciembre comenzó el periodo de exámenes para ella y sus compañeros.
La pequeña, en cambio, ya ha vuelto de Gales. Allí ha permanecido, a excepción de días tan señalados como el 18º cumpleaños de la princesa de Asturias —y la jura de la Constitución consecuente, desde que el pasado mes de agosto tomase el mismo rumbo que su hermana a los 16. La infanta, que también está cursando el bachillerato en el prestigioso UWC Atlantic College, ha ganado en independencia ahora que está alejada de sus padres e incluso asiste, como cualquier otra alumna, a los curiosísimos saraos que organizan los estudiantes. El caso es que su retorno a Madrid para las fiestas parece que ya se ha hecho efectivo, aunque el panorama que se ha encontrado en casa diste mucho del hogar que ella pudiera recordar. Para empezar, y como ya hemos avanzado, su hermanísima no está allí. Pero no es la única, porque el rey Felipe tampoco.
Se ha marchado, not found. ¿A dónde y por qué? El hijo de Juan Carlos I ha viajado hasta Argentina, concretamente a la ciudad de Buenos Aires, con motivo de la Toma de Mando del polémico Javier Milei. Se espera que vuelva cuando termine sus gestiones, claro está. En cualquier caso, por ahora la única que esperaba a la peque era mamá. Más relajadas que las últimas veces que han coincidido, podrán charlar tranquilamente sobre lo que gusten. Trivialidades varias, regalos de Papa Noel y un etcétera de lo banal. Apostamos con convencimiento que obviarán el elefante en la habitación.