En la foto que ilustra esta pieza, ven a las infantas Cristina y Elena con una banderita española colgando en el coche de la hermana mayor. Una España que este domingo ha vivido unas elecciones que, en clave Borbón, ha dejado claro que papi Juancar continuará quietecito en Abu Dhabi y que su sueño húmedo de volver a una España presidida por Feijóo, se va al garete. Una España que le ha dedicado un sopapo con la mano abierta a la derecha y la ultraderecha, a quien no permitirán gobernar. El PP y Vox, sin embargo, no son los únicos que las últimas horas han vivido un revés en toda regla. Y es que las hermanas del rey Felipe también han vivido en su propia piel una decisión que a pesar de no reducir sus privilegios vergonzosos, sí que no ha gustado nada a las infantas.
Y es que Elena y Cristina pierden uno de los últimos privilegios protocolarios que les quedaban a dos mujeres a quién ya nadie respeta. Ni la propia Armada españolísima que siempre ha sido uno de los ojos derechos de la corona española. Uno de los privilegios que tenían por ser miembros de la familia real. Y es que el portal LOC informa de una decisión que ha molestado a las dos hermanas, y más, porque no solo actúa en detrimento suyo, sino que juega en favor de sus sobrinas. Otro punto a favor de su odiada cuñada, la reina Letizia, a quien nos imaginamos sonriendo en su casa acariciando un gato. El citado medio recuerda que como es tradición, dos barcos de la Armada estaban bautizados con los nombres de la infanta Elena y la infanta Cristina, "dos patrulleros de Acción Marítima que prestaban servicio a las Fuerzas Armadas españolas".
Pero resulta que los años de uso han forzado su baja."El Infanta Elena causó baja en el primer trimestre de este año y el Infanta Cristina está en una situación similar. El patrullero, con base en Cartagena, afronta desde hace una semana su última misión en alta mar". El barco está vigilando las aguas del sur de la Península y será dado de baja el próximo septiembre después de 43 años de servicio en España y de haber participado en misiones tan nacionales como de la OTAN. ¿Y qué pasará a partir de aquel momento? Que las hermanas del rey Felipe se quedarán sin ningún barco bautizado en su honor. Pero queda la guinda del pastel, porque el diario apunta que a partir de ahora, "Una distinción que ahora están llamadas a tener las hijas de Felipe VI".
Y dentro de muy poquitos días, reencuentro de las dos hermanas precisamente con sus sobrinas, este paripé que ha instigado la yaya Sofía, que pretende reunir a todos los nietos, y los padres de las criaturas, en Marivent. Una reunión donde los puñales pueden ir que vuelan. Y ahora, un nuevo motivo de odio entre una rama de la familia y la otra.