La Familia Real española está ya casi al completo en Atenas. La muerte de Constantino de Grecia -el hermano de la reina Sofía y con el cual Don Juan Carlos tenía muy buena relación- falleció la semana pasada. Es el segundo funeral al que acude la reina emérita en apenas dos semanas, tras haber ido también al de Benedicto XVI. No está siendo un buen inicio de 2023 para Sofía que, eso sí, se ha sentido arropada en todo momento. Juan Carlos I, viniendo desde Abu Dabi, así como todos los integrantes de la Familia del Rey (menos la princesa Leonor y la infanta Sofía) están hoy dejándole claro qué es ser una familia. Apoyo, abrazos y empatía: muy bien la monarquía española, ahí.
Entre todos ellos, en el desfile que han hecho desde el coche oficial hasta la entrada de la catedral donde se celebra el funeral, se encuentran Victoria Federica, Froilán, los 4 Urdangarin (Irene, Pablo, Miguel y Juan Valentín), las infantas Elena y Cristina, los reyes eméritos y la princesa Irene de Grecia y Dinamarca (hermana de Constantino y Sofía). Vamos a centrarnos en dos de ellos que han sido protagonistas en los últimos tiempos, uno para bien y otro para mal. Son Irene Urdangarin y Felipe Juan Froilán de Todos los Santos de Marichalar y Borbón.
Irene Urdangarin: inmejorable
La verdad es que todos los miembros de la corona española han sabido escoger el atuendo perfecto para el funeral. En ellos hay que ir de negro y ahí han estado todos muy correctos, pero la que más ha destacado ha sido Irene Urdangarin, la menor de todos los primos que han asistido hoy al último adiós a Constantino de Grecia. La 10ª en la línea de sucesión al trono ha brillado por su vestido y su look para el funeral. Respetuosa con el atuendo, Irene ha optado por una melena rubísima perfectamente peinada hacia atrás con efecto mojado, unas medias negras, un abrigo muy adecuado para la ocasión y un bolso con cadena color oro el cual le quedaba muy muy bien. A todo eso, no ha faltado su detalle más preciado: los pendientes de 'El Corte Inglés' con los que deslumbró hace poco. Sin duda, la mejor.
Froilán es evitado
Pocos son los que se quieren hoy en día relacionar con Froilán. El sobrino de Felipe VI da demasiados disgustos a la monarquía española, y su última supuesta implicación en una riña quinqui en Madrid fue la gota que colmó el vaso. Eso no quiere decir que sea malo: es un gran nieto y ama a su abuelo, con el que ha pasado unos cuantos días en Abu Dabi recientemente. Incluso se ha llegado a especular que ambos residirán ahora juntos en el país árabe, pero nada más lejos de la realidad. Aun y ser un buen nieto -uno de los preferidos de JuanCar-, no hay mucha gente interesada en saludarse con él. Ha sido hoy el caso de Nicolás de Grecia, el príncipe de Grecia que, tal y como se puede apreciar en el vídeo, no ha hecho ningún esfuerzo por saludar a Froilán. Antes han pasado Victoria Federica, la infanta Cristina y la princesa Irene: