Irene Urdangarin no tiene claro que quiera continuar con sus estudios de Organización de eventos en la Universidad de Oxford. No se adapta a su nueva vida y echa de menos a Juan Urquijo, su pareja. Ese es el miedo que sobrevolaba por la cabeza de la infanta Cristina, que se echase una pareja antes de finalizar sus estudios. La idea era que la hermana de Juan, Miguel y Pablo estudiase en Ginebra Administración y Dirección Hotelera en la prestigiosa universidad de Lausana, pero por su bajo rendimiento escolar no superó las pruebas de acceso. Hizo un año sabático.

Según fuentes cercanas a Irene Urdangarin, su bajo rendimiento se debe a los dos duros años que ha pasado con el divorcio de sus padres. Le ha afectado demasiado, especialmente al vivir con la infanta Cristina y ver las discusiones de primera mano y la tristeza en su rostro. En más de una ocasión la ha visto llorar a lágrima viva.

Irene Urdangarin / GTRES

Irene Urdangarin no acepta a Ainhoa Armentia 

Tal vez este es el motivo principal por el que Irene Urdangarin no acepta a Ainhoa Armentia. La joven no creyó capaz a Iñaki de engañar a su madre de esta forma. Entiende que en un matrimonio pueda haber momentos de crisis, incluso que la mejor solución para todas las partes implicadas sea una separación, pero hacerlo sin dañar a la otra persona, sin mentiras y sin infidelidades. La hija de Juan Carlos I sabía que su relación con el exjugador de balonmano estaba rota, pero no era conocedora de su relación.

Hace un par de años que Irene Urdangarin solo habla con su padre por obligación. No mantiene la más mínima relación con él y mucho menos con la abogada. Sin embargo, con la nueva pareja de su madre la relación es muy diferente.

Ahora que han llegado a un acuerdo de divorcio, la infanta Cristina ha decidido rehacer su vida y ser feliz. Iñaki Urdangarin ya es el pasado. Mientras el exduque de Palma está enamorado de la abogada y pretende casarse, ella se ha enamorado de un empresario catalán, amigo de toda la vida con el que tiene una excelente relación y que se habría divorciado también hace poco.

La infanta Cristina ha visitado varias veces a Irene Urdangarin en Londres y ha ido acompañada por su nueva pareja. Juan, Miguel e Irene le han abierto los brazos de par en par. Todo lo contrario a Ainhoa Armentia.

Irene Urdangarin y la infanta Cristina / GTRES