Isabel Preysler todavía está con la resaca del pasado fin de semana, cuando vivió uno de los momentos más especiales de su vida. Aunque han sido muchas las señales que ha recibido Tamara Falcó de que debía pensarse un poco más si casarse con Íñigo Onieva, la socialité vio finalmente como su hija pasaba por el altar.

Cabe decir que la la Marquesa de Griñón era la última hija que le quedaba por ver a Isabel Preysler contrayendo matrimonio, tal y como se le escapó a Julio José Iglesias en el programa ‘Y ahora Sonsoles’ que presenta Sonsoles Ónega en Antena 3. En este sentido, se desconocía que Enrique Iglesias se había casado, pero según las palabras de su hermano, lo habría hecho en privado y en petit comité.

Isabel Preysler tiene listas sus vacaciones

La boda, teniendo en cuenta todo lo previo, ha sido interminable. Llevamos muchos meses hablando de ella, con todas las idas y venidas, las infidelidades, los cambios de fecha, los problemas con el vestido, el robo de las joyas… Pero por fin, el pasado sábado, la boda se completó satisfactoriamente.  

Isabel Preysler Chábeli boda GTRES
Isabel Preysler Chábeli boda GTRES

Ahora, con todos sus hijos casados y después de poner punto y final a este eterno episodio, Isabel se prepara para descansar y desconectar.  La ex de Mario Vargas  Llosa, entre otros, se prepara para un periodo vacacional de esos que están al alcance de muy pocos.

El destino vacacional de Isabel Preysler apunta a las islas griegas

Según señala una fuente cercana a Isabel, “tiene un viaje programado en yate” que compartirá “con sus amigos más cercanos”. No confirman el destino exacto, pero nos deslizan que “estará por las islas griegas”, uno de los destinos más paradisíacos y exclusivos. De hecho, es el lugar a donde la reina Letizia intenta escaparse durante sus vacaciones sin Felipe. El motivo de que no vaya a un destino más cercano es “porque la reconocerían”. Y teniendo en cuenta  que entre las personas  que la acompañan “estará su amigo especial”, no le interesa que los paparazzi la vean.

En este sentido, te contábamos recientemente que la Preysler está esperando a que baje el soufflé de la boda de su hija para seguir facturando con una nueva exclusiva que  tendrá que ver con un nuevo amor.  Y parece ser que Isabel estaría buscando evitar que nadie le chafe la noticia.