Estamos habituados a que de vez en cuando estalle algún escándalo relacionado con la familia real. Lo que no esperábamos era un bombazo como el que explotó esta semana y que vincula a la reina Letizia con una presunta infidelidad al rey Felipe VI. Sobre todo teniendo en cuenta que fue ella la que avisó a Felipe VI que no quería ser como su suegra y que lo abandonaría a la mínima señal de infidelidad.
Es cierto que todas las informaciones que se han publicado al respecto son cuestionables. Hoy en día es muy fácil trucar una foto. Además, no hay pruebas de que la foto fuera acompañada del texto publicado. "Amor. Llevo tu pashmina. Es como sentirte a mi lado. Me cuida. Me protege. Cuento las horas para volver a vernos. Amarte. Salir de aquí. Tuya", le habría escrito la reina Letizia a Jaime del Burgo, ex marido de Telma Ortiz y presunto amante de la reina Letizia entre 2002 y 2004, antes de conocer a Felipe, y entre 2010 y 2011, cuando estaba casada con el rey y ya había tenido a la princesa Leonor y a la infanta Sofía. De hecho, algunas fuentes comentan que Del Burgo se casó con Telma solo para estar cerca de Letizia.
Jaime del Burgo, como un segundo padre para la princesa Leonor
Sea como sea, lo cierto es que Felipe vivía en la inopia. Nunca sospechó que Del Burgo había tenido algún affaire con la consorte. Tanto es así que era Jaime el que ayudaba a Letizia con las pequeñas cuando Felipe tenía que responder a algún compromiso institucional fuera de Madrid o de España. No solo eso. Jaime también compartía algunas vacaciones con el núcleo duro de la familia real, ocupándose de Leonor y Sofía en lo que Felipe y Letizia no alcanzaban. Las niñas tenían una gran afinidad con Del Burgo, al que consideraban un segundo padre cuando Felipe no estaba. Sobre todo Leonor. De hecho, existen imágenes de la época en las que se ve a la princesa de la mano con Jaime, mientras paseaban acompañados de Felipe y la infanta Sofía.