Jaime del Burgo está dispuesto a destrozar la monarquía española, quiere acabar con ella porque considera que los Borbón han sido los culpables de la pobreza en España. Una dinastía que ha estado en el trono durante 300 años. Se considera monárquico pero no borbónico. El abogado se ha aprovechado de Letizia, el supuesto amor de su vida, para herir a la corona. Hace unos meses reveló en sus redes sociales que la reina había sido infiel a Felipe con él durante varios años. Parece que alguien ha iniciado una campaña de desprestigio para acabar con la madre de Leonor y Sofía, que en los últimos años ha logrado acaparar los focos y ha dejado a su marido en un discreto segundo plano.
Con sus declaraciones Jaime del Burgo ha desestabilizado el matrimonio, que ya estaba roto desde hace años. Sin embargo, ahora ya no tienen que esconderse. Desde que saltó la polémica, Felipe y Letizia hacen planes por separado públicamente, y ya no se les ve impostados en sus apariciones. El ex de Telma Ortiz ha logrado su primer propósito, pero no va a parar. Él mismo contó semanas más tarde que se encuentra escribiendo un libro sobre esta historia, y para ello ha recabado otros testimonios.
Jaime del Burgo ha retirado a Letizia de la corona
Casa Real no se ha pronunciado al respecto de estas declaraciones, ni confirma ni desmiente, como siempre opta por el silencio. Pero los rumores no cesan, incluso ya se habla de un posible divorcio el próximo año, cuando la infanta Sofía cumpla la mayoría de edad. En los cuatro últimos fines de semana, Felipe ha salido con sus amigos fuera de Madrid, Letizia se ha quedado en Zarzuela sola.
Así es como se está quedando Letizia en las últimas semanas, completamente sola. El pasado martes 27 de febrero asistieron a la misa homenaje a Constantino de Grecia celebrada en Windsor. Pero la reina estuvo sola. Llegó la última del brazo de Felipe VI para evitar cualquier fotografía de ella con los Borbón. No obstante, la obligaron a sentarse al lado de Juan Carlos, su peor enemigo.
A la salida de la capilla Letizia estaba totalmente desubicada. Detrás de Juan Carlos, Felipe y Sofía. Sin hablar con nadie de los Borbón ni los de Grecia. Sobraba totalmente. Además, se captaron las primeras imágenes sin esconderse del rey y el emérito juntos, padre e hijo hablando tranquilamente y abrazarse. Unas fotografías muy deseadas. Todo esto ha sido gracias a las declaraciones de Jaime del Burgo.