Desde que Vanitatis publicó las primeras informaciones sobre el asunto, muchos medios han estado dando informaciones acerca de un presunto encuentro multitudinario de la familia real que estaba previsto en Marivent. Sin embargo, en lo que ha sido una nueva humillación a Froilán y Victoria Federica, el evento se ha anulado “a última hora”.
Según las informaciones iniciales, estaba previsto que, mientras los reyes Felipe y Letizia y sus hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía, estuvieran en Marivent, también acudirían las infantas Elena y Cristina y sus respectivos hijos. Incluso se especuló con la posibilidad de que también acudiera el rey emérito Juan Carlos I. Al parecer, era una ilusión de la emérita Sofía recuperar la foto familiar que se produjo por última vez hace cinco años.
Los reyes cancelan la reunión familiar en Marivent
Según Vanitatis, estaba todo preparado. Los nietos de la reina Sofía ya tenían los billetes de avión y se habían alquilado coches para los desplazamientos. Incluso se había reforzado el servicio de limpieza en Marivent para la llegada del séquito familiar.
Sin embargo, como decíamos, este encuentro fue anulado “a última hora”, tal y como han revelado fuentes cercanas a la familia real al medio mencionado.
Una decisión que habría llegado principalmente por parte de la reina Letizia, siempre luchando por mantener la buena imagen de la monarquía y evitando la cercanía de quienes la han estado manchando en los últimos años. La consorte no quiere que nada ni nadie pueda poner en el más mínimo riesgo el futuro reinado de su hija.
Victoria Federica y Froilán, los principales repudiados en Marivent
“Que la princesa Leonor y la infanta Sofía pasasen sus vacaciones familiares con sus primos, en especial con los Marichalar, era algo que incomodaba”, recoge Vanitatis, según han revelado dichas fuentes. “Así de crudo lo plantean”, añade el medio.
Una decisión que ha sido tomada por Jaime de Marichalar como una nueva humillación hacia sus hijos, Froilán y Victoria Federica, siempre señalados por sus involucraciones en polémicas y por aprovecharse de su estatus para no pegar un palo al agua.