Entregados los premios Princesa de Asturias 2023, donde la familia real se ha regalado un baño de masas, donde han estado en un exclusivo hotel, donde la reina del acontecimiento ha sido una Meryl Streep que hoy hemos sabido que se ha separado, donde se vieron imágenes peculiares con Leonor como protagonista, este sábado tocaba la tercera entrega de la cita, con la tradicional visita al 'Pueblo Ejemplar' de Asturias, donde Felipe, Letizia y sus hijas van saludando al personal y los vecinos de la zona, que han salido en masa a las calles para saludar a los Borbones. Las parroquias galardonadas este año han sido Arroes, Pion y Candanal. Y hacia allí que han ido esta mañana del sábado. Pero si ayer por la noche se vieron muchos vestidos largos, hoy lo que ha predominado han sido las gabardinas y sobre todo, los jerséis. Y en este sentido, la reina Letizia ha protagonizado el look más extraño del día, y uno de los outfits más curiosos que se le recuerdan.
Un look casual, como lo que nos tenía acostumbrados en su época de periodista, con unos pantalones estrechos tipos pitillo de color negros, botas militares y un jersey de punto tie dye de colores vivos. Una pieza muy juvenil de Psophia que cuenta con cuello redondo en tonos verdes y malvas valorada en 265 euros, que ha llamado mucho la atención. Después, sin embargo, ha empezado a soplar viento y como hacía un poco de rasca, ha tardado poco en cubrir su llamativo jersey con un abrigo negro tres cuartos. Sus hijas, mucho más discretas, la princesa con una camisa vaquera combinada con unos jeans blancos, zapatillas en color crudo y gabardina beige, llevando el pelo recogido con una cola de caballo. En cambio, Sofía ha preferido dejarse el pelo suelto y también vestía de manera similar a su hermana, con pantalón blanco ancho y deportivas de color claro, jersey verde y cazadora con bolsillos de color caqui.
Durante todo el recorrido por el Pueblo Ejemplar, los vecinos no han parado de saludar, hacerse fotos, pedir selfies y tocar las manos de la familia real. También han recibido algún obsequio, como viene siendo habitual, como un cuadro de un gaitero, que Letizia se ha mirado interesada y que su marido también observaba en la distancia y poniendo una explícita cara al ver el dibujo. No ha sido el único regalo que han recibido Felipe, Letizia y sus hijas. Los vecinos de Villaviciosa también los han obsequiado con una cesta llena de productos frescos de la zona o les han servido sidra. También han estado mirando qué había en unos paradas con objetos y complementos, y uno de los momentos más emotivos ha sido cuando Letizia ha cogido en brazos al bebé más joven de Arroes, llamado Álvaro, en presencia de la madre del pequeño y su bisabuela.
Un paseo que no ha sufrido ningún momento inesperado como el año pasado, cuando a Sofía le sentó mal alguna cosa que habían desayunado y no pudo acompañar a los reyes en su visita al Pueblo Ejemplar.