Letizia quiere mucho a sus padres, pero es cierto que tiene una mayor relación y complicidad con Paloma Rocasolano que con Jesús Ortiz, y eso que su padre siempre ha sido un ejemplo para ella. Ya que se dedicó al periodismo por él. Vivía los medios de comunicación en casa desde bien pequeña. Cuando el periodista se casó con Ana Togores, la mujer de Felipe VI cambió por completo la percepción que tenía sobre su padre. Ana era compañera de trabajo y de la misma edad que la reina. Mucho más joven que su madre. Aunque solo son rumores, se cree que cuando Paloma y Jesús se divorciaron por diferencias irreconciliables, el comunicador ya conocía a la joven. Empezaron a salir poco después.
Para Letizia es una traición y humillación a Paloma Rocasolano, digamos que se le cayó por completo un mito. Ella adoraba a su padre y le falló. Pero la otra parte, como se puede leer en el libro de David Rocasolano, primo de reina, opina que Letizia cambió de la noche a la mañana cuando se prometió con el príncipe. Los desplantes a su familia eran constantes. Los trataba como seres inferiores, y es que así le había enseñado el protocolo de Zarzuela. Al final los Borbón siempre trataban a Letizia de esa forma porque era plebeya.
Jesús Ortiz, humillado por su hija
Jesús Ortiz siempre se ha sentido humillado por su hija, ya sea por él mismo, su mujer Ana, o por sus padres. La madre de Leonor y Sofía no quería a la familia de su progenitor cerca, especialmente a los padres del periodista, ya que le hacían pasar vergüenza.
El primer veto de Letizia fue a Ana Togores, pero también vetó a Antonio Vigo, padre de Carla Vigo, y a sus abuelos paternos. Mientras defendía a capa y espada a su abuelo Paco, el taxista, no pensaba igual de los padres de Jesús, tenía poca relación con ellos. Era muy campechano y para ella hacía el ridículo. No quería que le viesen con los Borbón ni con nadie de la familia de Juan Carlos o amigos íntimos.