A principios de mes, las relaciones extramatrimoniales de Juan Carlos I volvieron a acaparar titulares. Son muchas las amantes que atribuyen al rey emérito, pero hace unas semanas que sólo se habla de una: Marta Gayá. Y es que se hizo pública una conversación con un amigo íntimo que grabó el CESID (el actual CNI) donde confirmaba que era muy feliz con la empresaria mallorquina. Una grabación oculta durante 26 años.
Su relación acabaría en 2003, pero ahora se les ha pillado de nuevo juntos en la reapertura de una iglesia de Irlanda, durmiendo después en un castillo encantado.
El reencuentro del rey Juan Carlos y Marta Gayá en Irlanda https://t.co/zUw99rd0g7 pic.twitter.com/bApwP7dKG8
— Look (@CorazonLook) 9 de agosto de 2017
La cámara que captó la imagen no la llevaba la fotógrafa oficial de la fiesta, que a pesar de retratar a Juan Carlos I en varias ocasiones, en ningún caso lo hizo al lado de Marta Gayá. Sino que fue una mujer irlandesa quien les cazó juntos. Ahora se ha pronunciado por primera vez, sorprendida ante la repercusión que ha tenido su vídeo.
Marian Tighe ha sido entrevistada por el diario Irish Independent, donde ha explicado que todavía no se cree que su vídeo haya llegado a las 100.000 visitas a Youtube. Unas imágenes en las que aparece el rey y su amante, de pura casualidad: "Mi interés era ver la iglesia y los jardines. No me gusta curiosear y no tenía nada de interés al asistir a la recepción, sólo quería ver el nuevo edificio".
La visita real no había sido informada previamente, y todos los invitados -Marian incluida- se sorprendieron después al oír que se trataba del rey emérito de España: "El mecenas del proyecto -amigo íntimo del rey- dijo que contaba con un invitado especial, pero nosotros no teníamos ni idea de quien era. Hasta que al final lo presentó como Rey".
Era un caballero y posaba encantado por las fotografías, en cuanto empecé a grabar. Lo colgué en Youtube y se convirtió en todo un éxito. Entonces decidí poner el nombre del Rey al título y ya fue una locura", va fegir.
Una grabación hecha prácticamente sin querer que ha acabado sacando a la luz una relación que se creía acabada.