Juan Carlos arranca el septiembre pendiente de una fecha: lunes 28, día en que su examante Corinna declarará como imputada en la Audiencia Nacional. Se ha especulado que lo hará en castellano por videoconferencia en la embajada española en Londres o si el juez se desplazará al Reino Unido. Juan Carlos tiembla, el siguiente paso puede ser que el Tribunal Supremo lo impute por fraue fiscal. El emérito ha vivido mejores épocas, de romper camas. No con Corinna sino, oh sorpresa, con su mujer Sofía.

Sofía recordando mejores tiempos con Juan Carlos, GTRES

Jaime Peñafiel explica en República.com un episodio de lujuria sexual del entonces príncipe de España en casa de los Franco, en el Pazo de Meirás, con su esposa:  "La propia Sofía contó cómo fue de terrible aquella primera noche: 'Al ir a acostarnos se rompió la cama y nos caímos al suelo'. No especificó si, como podemos suponer, fue porque estaban follando. Se armó un ruido terrible y un jaleo con los barrotes, el somier, el colchón... 'Yo creí morirme de vergüenza. Y le dije, le supliqué a mi marido: por lo que mas quieras, no lo cuentes”.

Juan Carlos, un sátiro con furor sexual, GTRES

Peñafiel añade la vergüenza que pasó Sofía cuando el sátiro Juan Carlos, heredero señalado por el Caudillo, explicó durante el desayuno a Franco cómo había roto la cama haciendo sexo, como si fuera Pilar Rahola: "Al día siguiente, le faltó tiempo para soltarlo nada más llegar al desayuno familiar. A Franco y a toda su familia les hizo mucha gracia".

Franco y el sucesor que designó, Juan Carlos, GTRES

Parece la escena de una sit-com con las dos familias desayunando, los Borbones y los Franco. Y el gag de la cama rota. Pero es el símbolo de la España negra que todavía perdura.