Parece que el divorcio entre la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin está a punto de ser oficial. Los rumores indican que la pareja tiene previsto firmar los papeles de divorcio en un notario de Barcelona el próximo mes de noviembre. Esto llega cinco meses después de que Irene, su hija mayor, cumpliera 18 años el pasado 5 de junio. Con sus cuatro hijos siendo mayores de edad, se abrió la puerta para que el divorcio pudiera llevarse a cabo en privado.
Durante los últimos meses, se han esparcido rumores sobre las demandas de Iñaki en el proceso de divorcio. Entre otras cosas, se decía que pedía dos millones de euros y 25.000 euros mensuales. Se rumoreaba que esto estaba relacionado con su deseo de mantener en secreto ciertos detalles y secretos que conocía sobre algunos miembros de la casa real, especialmente el rey emérito Juan Carlos.
Aseguran que Iñaki Urdangarin cobrará en realidad unos 50.000 euros al mes
Este órdago se consideraba una especie de venganza personal por parte de Iñaki, quien creía que la casa real lo había dejado solo en el caso Nóos y que Juan Carlos I podría haber evitado su condena, pero optó por no hacerlo para mostrar que todos somos iguales ante la ley.
Finalmente, aunque no se saben las cifras exactas, el acuerdo se habría cerrado a cambio de unos 5.000 euros al mes. No obstante, desde elcierredigital, medio que dirige Juan Luis Galiacho, que a su vez fue quien habló de los dos millones y los 25.000 euros, asegura que esa cifra es lo que se ha dicho de cara a la galería. Y que en realidad Iñaki ya habría cobrado parte de los dos millones de euros y que, además de los 5.000 €, Urdangarin recibirá otros 45.000 euros en el extranjero.
Juan Carlos I da luz verde a la vida de Iñaki con AInhoa Armentia en España
Un dinero que, además, pagaría Juan Carlos I. A ello habría que sumar los entre 250.000 y 300.000 euros que cobrará en el puesto de asesor de Iberdrola que estrenó el pasado mes de septiembre, y al cual habría accedido con la ayuda de su todavía suegro.
Si estas informaciones son ciertas, queda claro que el padre del rey Felipe VI tenía un interés especial por zanjar el asunto. Y no solo eso. Está dispuesto a ayudar a Iñaki en lo que sea necesario. Y también habría dado luz verde a que Iñaki pueda hacer su vida normal con Ainhoa Armentia en España sin represalias. Todo ello con el objetivo de mantener a Iñaki con la boca cerrada.