El rey emérito Juan Carlos I ha vuelto a ser protagonista del foco mediático tras su reciente llegada a Sanxenxo, en Galicia. Aunque su viaje parece vinculado a las tradicionales regatas en las que suele participar simbólicamente, lo cierto es que esta vez hay un motivo de fondo más relevante: su reciente estancia en Suiza para realizar un cambio en su testamento.

Según recoge el medio Monarquía Confidencial, el emérito pasó cuatro días en Suiza antes de aterrizar en Galicia, en un desplazamiento que no se debió solo a cuestiones médicas. Además de someterse a una revisión general de salud, Juan Carlos habría aprovechado su visita para ajustar su herencia, una decisión que podría tener implicaciones importantes para su familia y entorno. Esta acción se enmarca también dentro de las controversias jurídicas que aún mantiene con su exabogado Dante Canonica y con su examiga Corinna Larsen, lo que sugiere un intento de poner orden en su patrimonio antes de que las circunstancias le impidan hacerlo.

Joan Carles a Suïssa / GTRES
Juan Carlos I en Suiza / GTRES

Juan Carlos I vuelve a estar en Sanxenxo

La llegada del exmonarca se produjo en la tarde del martes, directamente a la residencia de Pedro Campos, presidente del Club Náutico de Sanxenxo y amigo personal. Como ya es tradición, Juan Carlos permanecerá en su casa durante estos días previos a las regatas. Su participación, no obstante, sigue siendo una incógnita. Aunque sus problemas de movilidad son evidentes, desde el entorno náutico aseguran que se han hecho ajustes importantes en la embarcación Bribón para que pueda participar de forma simbólica, manejando el timón desde una silla adaptada.

“Ha bajado del avión sin muletas, solo apoyado en la barandilla”, explican testigos, dejando entrever que, pese a su avanzada edad, sigue empeñado en mantenerse activo. A sus 87 años, Juan Carlos continúa viendo en el mar un espacio de libertad y normalidad, lejos del protocolo y los conflictos institucionales.

Joan Carles I en una regata / GTRES
Juan Carlos I en una regata / GTRES

Juan Carlos I retoca su testamento

Durante estos días previos al evento deportivo, el emérito ha optado por mantener una agenda privada, centrada en encuentros personales y comidas con su círculo de confianza, como la tradicional cita con los regatistas y Campos. Aunque la muerte reciente del Papa Francisco ha hecho saltar algunas teorías conspirativas sobre la intención del viaje, sus allegados niegan cualquier vínculo: “El calendario de regatas se publica con meses de antelación”, aclaran al medio mencionado.

La revisión de su testamento en Suiza ha reavivado especulaciones sobre la distribución de su herencia y la posición de sus hijos, especialmente en un momento en el que las relaciones con Felipe VI siguen marcadas por la tensión.