Por suerte para la imagen de la corona, Felipe y Leonor no han heredado la mala fama de Juan Carlos. Mientras que al actual rey aún le sigue la sombra del exmonarca, la princesa se libra de su abuelo y recibe la ovación de todos los españoles. La hija de Letizia es la nueva era de la monarquía española. El hijo del emérito se vio obligado a abdicar a su padre y posteriormente a exiliarle a los Emiratos Árabes por todas sus polémicas. Se han tenido que ocultar muchos episodios oscuros, como sus infidelidades a la reina Sofía. Los eméritos nunca se quisieron y llevaron vidas separadas. El padre de Elena y Cristina se vio con un total de 5.000 mujeres, la mayoría de ellas prostitutas de lujo. Las malas lenguas asegura que a algunas las dejó embarazadas.
Fieles defensores de Juan Carlos, amigos de toda la vida, han hablado de sus historias de amor en su juventud. La fama de mujeriego ya le venía de entonces. Amadeo Martínez Inglés, coronel retirado del ejército, publicó el libro ‘Juan Carlos I. El rey de las cinco mil amantes’, pero no fue fácil que se publicase. Ninguna editorial estaba interesada por lo que se contaba en el interior. El excoronel se centraba en la etapa del emérito en la misma academia en la que se formará Leonor.
En sus momentos de ocio, Juan Carlos parecía aprovechar eficientemente su tiempo. Amadeo Martínez Inglés sostiene que participó en encuentros íntimos que en ocasiones fueron de naturaleza intensa, peculiar y poco convencional. Según el ex coronel, la mayoría de las mujeres con las que compartió intimidad el padre de Felipe VI eran trabajadoras del sexo, aunque de un estatus elevado. Martínez Inglés señala que era común contratar a mujeres de características particulares provenientes de fuera de España.
Juan Carlos I contrataba a prostitutas de lujo
Con algunas mujeres ha tenido serios problemas, pero como gozaba de la inviolabilidad nunca le ha importado. “Por ejemplo féminas muy jóvenes embarazadas por el personaje en los cuatro años en los que estuvo sujeto a la disciplina militar como cadete en las Academias Militares de Tierra, Mar y Aire. Se las despidió amablemente y salvo un par de ellas si no recuerdo mal, aparte los dos casos que han trascendido por vía judicial, la mayoría de ellas habrán rehecho sus vidas con un “borboncito” en el armario”, detalla Amadeo Martínez.
El coronel apuesta que a pesar de su avanzada edad y encontrarse en el exilio en Abu Dabi, Juan Carlos continúa practicando su deporte favorito. “A este monstruo del sexo no le bajan el lívido ni los años ni un pelotón de la Guardia Civil. Como acabo de decir, necesita a las mujeres más que al comer y beber, que ya es decir. En los últimos días se ha comentado que la periodista Laurence Debray era la amante de turno debido a la biografía sobre el emérito que va a publicar en Francia”.