Juan Carlos I esperaba la jura de Constitución de Leonor como uno de los actos más importantes de sus últimos años. Como sucedió con Felipe VI, le hubiese gustado estar presente en ese momento. Sin embargo, la figura del exmonarca no es necesaria y se ha decidido prescindir de él. Desde que le salpicaron tantas polémicas y se tomó la decisión de exiliarle a los Emiratos Árabes, el emérito no ha contado para la familia real. Siempre desaparece en todas las fechas importantes. No estuvo presente en la graduación de Leonor ni tampoco en la confirmación de Sofía. Tampoco estará en la jura de la Constitución de la princesa ante el Rey y por un único motivo. Los reyes no quieren que el marido de Sofía enturbie la imagen de la hermana de Sofía que tantos años llevan protegiendo. Se ha apartado a Juan Carlos de la corona española para eliminar su pasado, unas manchas muy grandes que han sido muy difíciles de quitar.
El emérito está profundamente dolorido por el trato que está recibiendo estos últimos años, son humillaciones constantes por parte de su propia familia. Y recuerda que ya no tiene ningún juicio pendiente para que se tome esta determinación con él. Fue rey de España y cree que se merece estar presente en la jura de la constitución de Leonor, pero Letizia no quiere ni una sola fotografía pública de abuelo y nieta. Su hija se apartará completamente de Juan Carlos.
Juan Carlos podría no asistir al acto sino se cumple con sus peticiones
Estos desplantes han provocado un gran enfado en el exmonarca. Ya ha comunicado a su hijo que es probable que no asista al acto solo para un almuerzo. Además, Letizia no deja que duerma en Zarzuela.
Pero si Juan Carlos I no aparece en la celebración de la mayoría de edad de Leonor podría ser un gran escándalo para la monarquía española. Se volvería a hablar de una mala relación con la familia y todas las culpas irán hacia Letizia.
Juan Carlos ha empezado una negociación contrarreloj con Felipe VI. Pide que se le deje estar presente en la jura de la Constitución de alguna manera. Además, quiere que se le deje dormir en Zarzuela, la que considera todavía su casa. Si no se cumplen con estos requisitos, como dijo Alessandro Lequio hace unos días, el emérito no viajará a Madrid el próximo 31 de octubre. Se quedará en los Emiratos Árabes. Y con su ausencia es probable que las infantas Elena y Cristina tampoco acudan al acto. La única representación de los Borbón sería la reina Sofía, tal vez acompañada por Irene de Grecia.