La decadencia de la imagen del rey Juan Carlos I empezó con una foto: la del monarca presumiendo de haber matado un elefante en 2012. El safari del rey emérito en Botsuana supuso el principio del final, un viaje que realizó con la amante que ahora le ha traicionado, Corinna, su hijo Alexander, de 10 años, y unos cuantos amigos.

¿Como nos enteramos del viaje? Porque tuvo la mala suerte de caerse y romperse la cadera derecha, con lo que tuvo que ser traslado en Madrid para ser operado de urgencia.

Que pagara 30.000 € por matar un elefante mientras el país vivía una profunda crisis económica no hizo nada de gracia. De hecho, causó un gran escándalo político y social. Su índice de popularidad se hundió y dos años después -con el estallido del caso Nóos por el medio- anunció su abdicación.

TV3

Pues bien, ahora TV3 ha conseguido hablar con el guía de caza que tuvieron en aquel viaje. Jeff Rann es el hombre que organizó la caza en Botsuana, quien aparece a su lado en la fotografía. Y en esta primera entrevista en televisión, ha querido defender al monarca: "Teníamos una relación de cliente, amigo y cazador. No entiendo el alboroto político, lo que hizo fue totalmente legal. Fue una buena cacería, le gusta la naturaleza".

Pero va todavía más allá, diciendo que el safari sirvió para ayudar al país: "Y el dinero proveniente de aquellos safaris ayudó a Botsuana a proteger los animales. Para mí que pidiera perdón es política. No intento meterme ni prestar atención a las emociones que suscite...".

Clica en la imagen para ver el vídeo / TV3

El escándalo todavía le persigue, y muchos le recuerdan el ridículo que hizo entonces. Ahora vuelve a estar en el ojo del huracán al filtrarse los audios de Corinna acusándolo de ser corrupto, y mucha gente está pidiendo ya que lo echen de la familia real. ¿Veremos llegar este momento?