Juan Carlos I es cada vez más mayor y está más alejado de Casa Real. Desde que se le obligó a exiliarse a los Emiratos Árabes, donde tiene grandes amistades, ya no pertenece a la institución. Se le ha apartado de cualquier tipo de compromiso. Ha pedido en varias ocasiones acudir a algunos eventos importantes para la familia y se ha denegado su presencia. No pudo estar presente en la jura de la Constitución de Leonor ni tampoco el X aniversario de la proclamación de Felipe VI como rey de España. Tampoco puede pernoctar en Zarzuela ni aparecer por ahí, su presencia está totalmente vetada. Además, cuando hay algún compromiso importante, como la próxima semana en la que la princesa recibirá el despacho de alférez por parte del ejército, se le pide encarecidamente que no viaje a España.
En los últimos meses se ha hablado mucho de la salud de Juan Carlos I. El emérito visita prácticamente todos los meses una clínica de Vitoria donde recibe un tratamiento novedoso basado en la medicina regenerativa. Se trata de inyección de células madre combinadas con plaquetas. En su caso suele usar este tratamiento para sus problemas de cadera. Ha sido intervenido en varias ocasiones desde su caída polémica en Bostwana, que marcó el declive de su reinado. Sus problemas no se han solucionado porque son degenerativos, él solo intenta frenar su evolución luchando contra el paso del tiempo.
El final de Juan Carlos está en una silla de ruedas
El problema de Juan Carlos no tiene solución y se incrementa. En más de una ocasión se le ha podido ver en silla de ruedas aunque él siempre trata de evitar esas imágenes, es algo que le pone enfermo, no le gusta que le vean deteriorado, debilitado. Siempre que tiene una aparición, pide que se le inyecte el tratamiento para poder aguantar en pie durante ese día, solo con la ayuda de su bastón y su personal de confianza.
Los médicos han sido muy claros con él, sus problemas de movilidad no tienen solución y terminará sus días en una silla de ruedas. Habrá un momento en el que el tratamiento ni tan siquiera será efectivo por su avanzada edad.
Felipe, Cristina y Elena están al corriente de sus problemas y su evolución. Han mostrado su preocupación y ha sido uno de los motivos por los que se han reunido recientemente. Se ha hablado en varias ocasiones de la posibilidad de instalarse en España, aunque no sea en Zarzuela, pero por ahora el rey no lo contempla. Le ha costado mucho tiempo a Casa Real desvincularse completamente de los Borbón. Han salvado la permanencia de la corona y el futuro de Leonor, así que no está dispuesto a echarlo todo por tierra.