Un ministro de Defensa debería callar para siempre, pero José Bono es tan bocazas como vanidoso. En en su (poco vendido) libro de memorias destapa chismorreos sobre el rey Juan Carlos, con quien despachaba como Jefe de las Fuerzas Armadas. Un fragmento del libro que deja al "campechano" como un maleducado. Como jefe del Estado tenía que recibir a todos los líderes políticos del Congreso. Y antes de que su hijo se negara a recibir a Carme Forcadell, Juan Carlos ya tuvo dudas de cómo recibir a otro diputado independentista. Uno vasco, Xabier Mikel Errekondo Saltsamendi, del partido Amaiur.

EFE (Archivo / diciembre 2011)

En la foto se aprecia la cara de asco del monarca con el diputado que quería la independencia de Euskadi. Al programa En Jake han destacado cómo Bono explica que el ministro tuvo que ensayar con el rey cómo tenía que estrecharle la mano al diputado. Un ridículo histórico. "Me recibe el rey desfigurado, con heridas y moratones. Se los ha hecho al abrir una puerta (sic). Me comenta que va a recibir a Amaiur y que lo hace por mandato constitucional. Le aconsejo que le salude con un gesto grave. El rey me dice que ensayemos cómo tiene que darles la mano. Y así lo hacemos". Este es el vídeo:

El rey como un mal actor: "Mírame la cara a ver si estoy serio". No se puede ser más cutre. La foto que demuestra cómo el rey impostó una cara seria, con las facciones caídas y apretando más fuerte. Así dio la mano a Amaiur:

EFE

Juan Carlos ha recibido a algún diputado indepe catalán. A Pilar Rahola la magreó. Siempre a punto para ser maleducado con los independentistas. Si la monarquía es imagen, ya no puede caer más. Ensayar una gravedad impostada. Toda la Corona es una gran impostura.