El rey emérito Juan Carlos I ya se encuentra preparando su próxima visita a España. El padre del rey Felipe VI regresará al país el próximo fin de semana. Sus intenciones pasan por participar en la Octava Regata Rey Juan Carlos I, que se celebra entre el 29 de septiembre y el 1 de octubre en Sanxenxo. Será la tercera visita del ex monarca este año. Y no será la última. Está previsto que a finales de octubre realice otro viaje a España para asistir a la jura de Constitución de su nieta Leonor. Este acto tendrá lugar el próximo 31 de octubre, día en el que la princesa cumple 18 años.
En ambos casos, son visitas a las que la casa real ya no pone objeciones. Después del revuelo mediático de su primer viaje después de instalarse en Abu Dabi, los reyes Felipe y Letizia dieron un toque de atención al ex Jefe de Estado. Le exigieron que no se volviera a repetir la estampa. Y le pidieron discreción en sus visitas siguientes.
Juan Carlos I tiene abiertas las puertas de España
Dicho y hecho, Juan Carlos ha cumplido a rajatabla. Tanto es así que los monarcas ya ni siquiera le exigen que llame antes de venir para pedir permiso. Se ha levantado el veto.
Ante este panorama, Juan Carlos podría plantearse cumplir uno de sus mayores deseos: volver a vivir en España. El emérito no quiere morir fuera de la que considera su patria y, ahora que los ánimos están calmados, regresar definitivamente es algo que se podría plantear.
Juan Carlos no se quedaría permanentemente
No obstante, en caso de llevar a cabo su plan, no tiene intenciones de vivir permanentemente en España. No le interesa. Y todo tiene que ver con la fortuna que posee.
Se desconoce lo que tiene exactamente el rey emérito Juan Carlos I entre patrimonio y efectivo. No obstante, algunos medios especializados la sitúan en unos 2.000 millones de euros. Una cantidad que quiere conservar y que no pondrá en juego. Por eso no piensa vivir en España más de lo que le permite la ley para evitar declarar dichos millones al fisco.
Juan Carlos no quiere que le pase como a Shakira, acusada de no haber declarado en España cuando debía por haber pasado más de medio año viviendo en territorio español. Y en caso de volver, no estará en España más de medio año. De hacerlo, tendría que tributar en este país. Y en este sentido, las leyes de los Emiratos Árabes le favorecen. Es mucho más cómodo entrar y salir con su capital sin tener que rendir cuentas con Hacienda.