Que sí, que sí. El Madrid, campeón de Europa. Esta nos la sabemos de memoria. El estadio londinense de Wembley fue el escenario de la decimoquinta, desde donde se proyectaba un espectáculo de imágenes chocantes. Y no, no era ver a Carvajal o Vinícius Jr. marcando los goles blancos, ni la enorme cantidad de ocasiones desaprovechadas por el Borussia Dortmund, que mereció otro destino. El auténtico show se encontraba en las gradas y en los palcos. En uno privado, concretamente, estaba Juan Carlos de Borbón y su nieto, Froilán. Los compañeros de destierro en Abu Dabi hicieron una quedada para ver el partido desde una zona VIP. Uno se desplazaba desde Ginebra, su nueva residencia oficiosa. El otro, desde Ibiza y Madrid, donde ha disfrutado de toros, cenas de parejita y su predilecto dolce far niente. Era un planazo, sobre todo si la cosa acababa con victoria blanca.

La presencia de la pareja quedó acreditada por la realización del partido, enfocándolos en algunos momentos de la retransmisión. Un pequeño anticipo de lo que este miércoles 5 de junio de 2024, día de prensa del corazón, nos muestra la revista '¡Hola!'. La publicación ultramonárquica ha dedicado la portada a este evento, coincidiendo con el aniversario de la abdicación del emérito en 2014, su paso anterior a la huida de España. Curiosa manera de celebrarlo, sí. Hay que decir que el encargado de la portada merece un premio. O que lo echen. Una de dos.

Juan Carlos y Froilán en Wembley / TVE

Esta cara inflada es la de Juan Carlos, seguramente provocada por la alegría del triunfo del club de su queridísimo Florentino Pérez, quien lo invitó al estadio inglés. En todo caso, da miedo. Estremece. Últimamente nos hemos pegado un hartón de ver la figura del exrey durante sus incontables visitas a España, y nunca habíamos observado este aspecto, más bien caricaturesco, del personaje real. Pero claro, después está Froilán. Otro que también te deja pasmado con sus expresiones físicas y corporales. También con gestos desagradables. Lástima que no podamos enseñar todo el material, pero haremos una descripción sencilla. Está sacándose un moco, y justo antes de chocar los cinco con el abuelo por la victoria. Una marranada, una más. Claro que eso es una cosa heredada, como vimos en Sanxenxo. Imaginamos ahora mismo Felipe VI avergonzado. Qué imagen. Menos mal que no fue, al encontrarse en El Salvador. Y que es del Atleti, o eso dicen.

Froilán / GTRES
Juan Carlos / GTRES

Después de la final llegó la gran celebración. Todo en su escala, claro: Juan Carlos, con 86 años, no está para hacer dobletes, pero Froilán puede pasarse 48 horas a full sin despeinarse. Lo decimos porque cenaron en un selecto restaurante de Londres, explica EsDiario, y más tarde Pipe visitó los clubs y garitos del East End, una zona de moda con marcha nocturna famosa en todo el mundo. Este parte fue únicamente para el hijo de la infanta Elena, el de las camisas horteras de Balenciaga de 1100€. Iría en chándal. Y con el escudo del Madrid. Cero pruebas, cero dudas.

Froilán saliendo de un after en Leganés / Telecinco

La vida sea igual, que diría su amigo Julio Iglesias. Igual de mal.