Juan Carlos I desobedeció las órdenes de Letizia y Felipe. Actualmente no pesa ningún cargo sobre él y por tanto puede viajar libremente. Volvió a España para disfrutar de las regatas de Sanxenxo, pero realmente su intención era “arreglar papeles”. No entraba en detalles, pero necesitaba vender algunas propiedades de Cataluña y Galicia que se encontraban a nombre de terceros para facilitar la herencia a las infantas. Además, debía reunirse con Iñaki Urdangarin en Vitoria para cerrar los temas del inminente divorcio. El emérito no quiere hacer daño a su hijo, jamás perjudicaría su reinado, pero con Letizia la cosa cambia. Para él la actual reina es su mayor enemiga, la culpable de todos sus males, como su exilio en Abu Dabi. Los reyes le pidieron discreción y cumplió. Sin embargo, los periodistas David Fernández y José María Olmo aprovecharon el momento para promocionar su nuevo libro ‘King Corp’.
En las primeras páginas del libro que esconde los secretos más ocultos de Juan Carlos se habla de la supuesta cuarta hija ilegítima del exmonarca. Hablan de una tal “Alejandra” y todas las conjeturas han concluido en Alejandra de Rojas. La conocida modelo se encuentra sobrepasada por la situación. Era conocedora de los rumores desde hace décadas, pero siempre se lo ha tomado con humor. Ahora han colmado su paciencia y la de su familia.
Alejandra de Rojas emitió el pasado lunes un comunicado en el que aseguraba que tomaría acciones legales contra todas aquellas personas y medios de comunicación que publicasen informaciones falsas sobre ella. Sus palabras se publicaron dos días después de las de Juan Carlos I.
Juan Carlos I y Alejandra de Rojas no emitirán ningún otro comunicado
La familia de Alejandra de Rojas también ha hablado, como su única hermana, Ana de Rojas. Según éstos, Charo Palacios habría conocido en el pasado a Juan Carlos I, ya que siempre alardeaba de esa relación. No obstante, se desconoce si en algún momento mantuvieron relaciones íntimas, aunque creen que podría haber sucedido. Dejan claro que el emérito no es el padre de Alejandra, pero la aristócrata conoció al marido de Sofía a finales de los 70, justo cuando nació la modelo. Además, como ellos mismos cuentan, el padre de Alejandra no es su padre biológico, y ella es conocedora de ello porque se lo explicó Charo cuando era pequeña.
Estas afirmaciones de su entorno más cercano avivan aún más los rumores de esa supuesta paternidad de Juan Carlos I. Sin embargo, los protagonistas de esta historia lo han negado. Algunos creen que se debe a un pacto de silencio en Casa Real. Todos han acordado no pronunciarse más sobre este asunto. La intención es que el silencio termine con las habladurías y tanto el emérito como Alejandra dejen de estar en el foco mediático.