Desde Abu Dabi, Juan Carlos continúa en contacto con su familia, especialmente con Elena y Cristina. Mientras que Felipe se ha desvinculado totalmente del apellido Borbón, sus hijas serían las únicas herederas de su gran fortuna. Dos mil millones de euros que heredarán las infantas, ya que el rey renunció a ella para salvar la imagen de la corona. Se repartirán la cantidad y ya tendrían la fórmula secreta para librarse de la Hacienda Pública, uno de los principales motivos por los que el emérito no vuelve a España. El régimen fiscal de los Emiratos Árabes beneficia a las grandes fortunas como la suya.

Ahora que todos han alcanzado la mayoría de edad y llevan vidas independientes aparte de sus padres, el exmonarca y su hija han utilizado a sus descendientes para iniciar el proceso de legitimación de sus dos mil millones de euros, la futura herencia de las dos hijas del exmonarca tras su fallecimiento. Esto se debe a que Felipe renunció a la herencia después de enfrentar problemas legales.

Juan Carlos I GTRES

El verdadero motivo por el que Juan Carlos no vuelve a España 

Este constituye el principal obstáculo que impide que permanezca de manera permanente en España en este momento, limitándose a realizar visitas esporádicas. Aunque le gustaría regresar y vivir cerca de su hogar, especialmente a sus 86 años, pasar más de 186 días en España obligaría a declarar su considerable fortuna en su país de origen, algo que prefiere evitar. El sistema fiscal de los Emiratos Árabes, en cambio, favorece a las grandes fortunas.

En las recientes semanas, Jaime del Burgo ha captado la atención mediática con sus afirmaciones sobre la reina Letizia. Ha revelado una presunta infidelidad de Felipe, afectando la imagen de ambos y, lógicamente, la reputación de la monarquía. Sin embargo, parece que la reina no es su principal preocupación, ya que otros miembros de la familia también han sido objeto de atención, como Juan Carlos.

Leonor, Juan Carlos y Felipe EFE

"Hablemos de transparencia: Juan Carlos debería regresar y establecer su residencia en España para no ocultar a los españoles y a la Hacienda la millonaria, billonaria fortuna que va a dejar en herencia, si no la ha transmitido ya vía donación. Al rey emérito no lo ha exiliado Felipe. Ha huido con la complicidad de la Familia y del Gobierno. Otros miembros de la dinastía tienen  su residencia fiscal fuera de España, en países no sujetos a tributación por herencia o sucesión. Lo que se pretende ocultar es grave: ¿cuánto ha ganado la dinastía desde que Franco los eligiera sucesores a la jefatura del Estado? ¿Cuándo? ¿Cómo? ¿Quién recibirá o ha recibido qué? En una sociedad de salarios paupérrimos las cifras, intuyo, marearían a la mayoría. Tenéis obligación de ser ejemplares ya que no todos somos iguales ante la ley ni nacemos con las mismas oportunidades. Nos silbaban las balas mientras vosotros os enriquecíais. Ahora quienes nos disparaban, gobiernan. 'No pude hacer nada para evitarlo'. Vaya si se podía, y con la Constitución en la mano. No se puede uno atrincherar en los privilegios que le otorga la Constitución y tomar juramento al Gobierno que intenta destruirla”, se sincera Jaime del Burgo.

El jurista sostiene que Juan Carlos oculta su considerable riqueza con el objetivo de evitar cualquier pérdida económica, y le reprocha su falta de cooperación con España a pesar de ser ciudadano español. A excepción de Pablo, se afirma que todos los hijos de la infanta Cristina habrían recibido