El rey Juan Carlos I se encuentra en el centro de un huracán mediático que no cesa. Pilar Eyre destapó la caja de los truenos al asegurar que el emérito tiene una hija ilegítima con una aristócrata muy famosa. Los interrogantes se multiplicaron rápidamente, iniciándose las apuestas. Y la Casa Real optó por no emitir ningún comunicado al respecto, manteniéndose al margen de la polémica.

Ahora bien, parece que todo está temblando otra vez. Hace un par de años, Ingrid Sartiau inició los trámites legales pertinentes para intentar demostrar que ella también es hija del rey Juan Carlos. El Tribunal Supremo desestimó la demanda que presentó, pero ahora estaría dispuesta a volver a acudir a la justicia.

"Puse todas mis esperanzas en este proceso. Alquilé un apartamento cerca de mis abogados, dejé mi trabajo, me divorcié a causa de la presión e incluso perdí mi casa. Todo para intentar acercarme a mi padre", ha confesado a Look.

Hija de una mujer belga, con quien el monarca habría tenido un affaire en 1966, Ingrid solo quiere demostrar que es hija del rey emérito para conocerlo: "Mi madre se enfrentó sola y se guardó este secreto durante mucho tiempo. Mis hijos me han estado ayudando, poniendo las propiedades en juego aun sabiendo que podían perderlo todo. Todo lo que he hecho, lo he hecho por mi padre. Si pudiera dar marcha atrás, actuaría de la misma forma".

Su Facebook personal está lleno de montajes para demostrar que se parecen físicamente / Ingrid Sartiau

Muchos le han acusado de mentirosa, de orquestar un show por dinero. Pero ella siempre lo ha negado: "Mi único deseo es ser reconocida, no es una cuestión de dinero. Trabajo como todo el mundo. Si hubiera algún tipo de herencia, esta tendría que ir al pueblo español". ¿Qué hará ahora la justicia? ¿Volverán a negarse a investigarlo?