La relación entre Juan Carlos y Felipe se ha visto truncada en los últimos meses por los movimientos del emérito. El rey tiene claro que debe desvincularse totalmente de él si quiere que su reinado prospere, y más aún el de Leonor. La estrategia habría funcionado porque ahora mismo la princesa es la integrante de Casa Real mejor valorada de toda la familia. Se ha desatado la ‘Leonormanía’, y eso en parte es porque la hija de los reyes no tiene ninguna relación con los Borbón. De hecho, ya nadie la vincula con ese apellido.
Desde 2019 no hay ni una sola fotografía de Juan Carlos y Leonor juntos. Han evitado que se reencuentren en público a toda costa. Como si no fuesen nieta y abuelo. En 2020 Casa Real se vio en la obligación de exiliar al emérito a los Emiratos Árabes, con los que España tiene excelentes relaciones. Hasta finales de 2021 no se empezó a valorar la posibilidad de que el marido de la reina Sofía pudiese viajar a España. En 2022 y 2023 empezaron sus constantes viajes a su país, cada vez más frecuentes y con menos interés mediático, eso es lo que se intenta conseguir, que la presencia de Juan Carlos pase inadvertida y sea algo totalmente normal, y es que ya no pesa ningún cargo sobre él, pero por ahora no se valora la posibilidad de que resida nuevamente en Madrid, ni tan siquiera en otra ciudad. Se habló de Sanxenxo, pero a Juan Carlos no le conviene vivir en España porque su patrimonio de más de 2 mil millones de euros estaría a ojo de la Hacienda Pública.
Felipe VI no quiere que a Juan Carlos se le relacione con la corona
Juan Carlos y Felipe están muy distanciados por todos los obstáculos que el monarca pone al emérito. Está cansado de que no pueda viajar a su país siempre que quiera y tenga que estar rogando como si fuese un delincuente.
Casa Real se ha desvinculado totalmente de Juan Carlos y no puede permitirse ningún error. Nunca más se va a dejar que el emérito sea relacionado con Leonor. Tendrá que acatar las órdenes de su hijo hasta el fin de sus días. Siempre que haya un evento importante como fue el aniversario de la proclamación de Felipe VI, o los premios Princesa de Girona de Leonor, el marido de la reina Sofía no tendrá sitio en España. No quiere que el foco mediático se desvíe de los verdaderos protagonistas. Esta semana pensaba volver a volar a Sanxenxo, pero se le ha vuelto a prohibir. Igual que tampoco se le deja acudir a ningún evento de su hijo ni su nieta.
