Si recientemente se cumplieron 20 años desde que Felipe VI y Letizia se casaron, el próximo 2 de junio se cumplirá una década desde que asumieron el rol de reyes. Es decir, se cumplen 10 años desde que Juan Carlos I abdicó. Un momento del que ha hablado Pilar Eyre en su canal de YouTube, revelando el preocupante motivo y una escena lamentable del emérito que significó el principio del final de su reinado.

La experta en la casa real empieza apuntando que “Juan Carlos I llevaba unos años de actuaciones erráticas, llevaba 10 años de relación con Corinna, la tenía como segunda esposa en los países árabes, a donde iba con cierta frecuencia”. Una Corinna a la que asegura que es la única mujer a la que ha querido de verdad”, mientras se refiere al silencio y a la censura que hubo en la prensa sobre este asunto, mientras los medios corrían cortinas de humo como el caso Nóos o la presunta anorexia de la reina Letizia.

El incidente de Botsuana aceleró el deterioro de Juan Carlos I, tanto físico como mental

Tras esta introducción, Eyre hace referencia a los problemas de salud que empezó a tener después del episodio de Botsuana, y señala su rotura de cadera como el inicio de su declive físico. Algo que también influyó en su carácter y su estado de ánimo. Concretamente, la periodista recuerda una escena en la que se enfrentó a la prensa, “exaltado”, acusando a los periodistas de que querían matarlo. “No lo vais a conseguir”, espetaba el ahora emérito.

Juan Carlos caza en Botsuana efe
Juan Carlos caza en Botsuana efe

Mientras tanto, hablaba mal a Sofía y “su actitud era totalmente desmesurada, se creía impune, que estaba por encima de todo y que nadie osaría nunca revelar las verdaderas razones de por qué estaba mal”. “Hasta tal punto que se planteó divorciarse de la reina Sofía y de casarse con Corinna. Llegó a comentárselo al presidente del Gobierno, entonces Mariano Rajoy”, que le indicó que no era el momento de hacerlo debido a la situación económica y social de España. El mismo consejo le dieron sus hijos, Elena, Cristina y Felipe. “Estaba atravesando un momento mental un poco distorsionado”, insiste Eyre.

Espectáculo esperpéntico en la Pascua Militar

Llegados a este punto, la periodista se centra en lo ocurrido en la Pascua Militar celebrada en enero de 2014. “El aspecto del rey fue nefasto, estaba flácido, mal color, se movía de una forma torpe, llegó a duras penas al atril y fue el discurso más patético que hemos visto los españoles. Se equivocó con los papeles, tartamudeaba, no entendía lo que estaba leyendo, se notaba que realmente estaba sufriendo y deseando que aquello llegara a su final. El final fue un desastre, le temblaban las manos… Todo el mundo se quedó estupefacto”, recuerda la experta. “El primer vídeo que hubo de la escena mostraba las caras de la gente y todo el mundo estaba con una expresión de angustia preguntándose si llegará al final, si se caerá… En ese momento todos nos dimos cuenta de que el rey no podía seguir siendo rey. Y también Felipe, que propuso poner en marcha el tema de la abdicación y la sucesión”, señala Eyre, que a continuación explica el motivo de que el rey estuviera tan mal.

Juan Carlos en Sanxenxo bastón EuropaPress
Juan Carlos en Sanxenxo bastón EuropaPress

Según Eyre, Juan Carlos había estado en Londres con Corinna con su familia, el hijo de Corinna, el ex marido de Corinna, y un grupo de amigos. Tenía pensado volver el domingo por la tarde, pero había niebla y tuvo que esperarse porque el avión no podía despegar. Al final despegó a las 4 de la mañana, lo que significa que llegó a la Pascua Militar (que era el lunes) sin pegar ojo”, revela Pilar. Y no solo eso: “En esos días había estado bebiendo mucho, comiendo mucho, llevando una vida muy alterada y, realmente, no estaba en condiciones”. A partir de ahí, el proceso de abdicación ya no tuvo freno.