El rey emérito Juan Carlos I ya ha abandonado Abu Dabi y se encuentra en Londres. Fue este lunes cuando el padre del rey Felipe VI llegó a la capital británica. Un día que alargó hasta altas horas de la madrugada.

Juan Carlos aterrizó este lunes en Londres, donde mantuvo un encuentro con Carlos III. El emérito tiene prohibido asistir al acto de coronación del monarca británico el próximo 6 de mayo y, a cambio, Carlos III lo invitó a un almuerzo. Pero la actividad del emérito en la capital británica no terminó aquí.

Juan Carlos I, pillado de madrugada en un exclusivo club de Londres

Porque el marido de la reina emérita Sofía fue visto y fotografiado por la noche saliendo del club Oswald, un local privado que se postula como uno de los más exclusivos de la ciudad. El emérito no perdió la oportunidad de pegarse una buena juerga antes de poner rumbo a España y pasar el resto de la semana en Sanxenxo, donde disfrutará de unas regatas con el Bribón.

Juan Carlos regatas EFE

Un viaje que Juan Carlos realizará este miércoles y para el que el estado ha montado un protocolo de órdago. Tal y como señala el medio digital Vozpópuli, este lunes se reunieron miembros de la casa real, de la Guardia Civil, de la Policía Nacional y cuerpos locales para que la visita de Juan Carlos sea totalmente segura. El medio también señala que se han enviado “agentes de avanzadilla” para comprobar el terreno. Este grupo se llama ‘caravana’ y pretende acompañar al emérito durante toda la semana.

Seguridad máxima para el emérito Juan Carlos I

Está por ver si este año se repetirán los tres coches que dispuso la casa real en mayo del año pasado, además de los tres vehículos de escolta y los 15 guardaespaldas que velaban por la seguridad del emérito.  A ellos, además, se sumaron los GRS de la Guardia Civil y de la Policía Local de Pontevedra para proteger al emérito por tierra, una unidad de buzos de La Coruña para protegerlo por mar, y el equipo PEGASO de Pontevedra para protegerlo por aire. Este último cuenta con tres aviones no tripulados y de un rifle antidrones. En cualquier caso, el medio mencionado asegura que el protocolo será muy similar. Para estar apartado de la casa real, lo cierto es que se le dedican muchos recursos y muy costosos.

Por otro lado, el digital también habla de los lugares en los que se podría alojar el emérito a lo largo de la semana. “Él quiere ir a la casa de Campos, pero lo cierto es que puede pernoctar en sitios diferentes desde su llegada”, comenta una fuente. Porque “la otra vez quedó claro que la casa de Pedro Campos no es precisamente un búnker, aunque alguno quiera verla así”. Y señalan que desde Zarzuela quieren evitar que sea un espectáculo como el año pasado y que proponen que se aloje en una sala del Real Club Náutico llamada ‘el camarote’. “Puede ser en la casa de Pedro Campos, en el camarote de Sanxenxo... o en el chalet de otro amigo”, comenta dicha fuente.