Juan Carlos I continúa residiendo en Abu Dabi, y este período en la ciudad será su cuarto año consecutivo. El exmonarca se encuentra en compañía de su personal de servicio, algunos amigos y, posiblemente, una amiga especial, se especula que podría ser Marta Gayá, su última pareja conocida. No obstante, a pesar de su deseo, el padre de Felipe VI anhela regresar a España de forma permanente, pero esta posibilidad no está contemplada en los planes de la familia real.
La reputación del esposo de la reina Sofía ha sufrido considerablemente a raíz de sus recientes controversias, generando un rechazo notorio por parte de una gran porción de la población. A pesar de ello, durante el último año, han intentado proyectar una apariencia de normalidad mediante sus apariciones públicas. Durante el transcurso del año 2023, Juan Carlos ha visitado suelo español en siete ocasiones, asistiendo a eventos como las regatas en Sanxenxo, el divorcio de la infanta Cristina, y los cumpleaños de Leonor y la infanta Elena. Sin embargo, estas apariciones no han tenido un impacto significativo.
Toda la familia está muy preocupada por la salud de Juan Carlos
Felipe VI muestra una creciente preocupación y un fuerte deseo de tener a su padre en España, en proximidad. A pesar de las acciones pasadas, Juan Carlos sigue siendo su progenitor, y dada su avanzada edad, sus problemas de salud se han multiplicado. Aunque en sus apariciones públicas el exmonarca ha mostrado buena salud, la realidad es diferente. Juan Carlos requiere el uso de una silla de ruedas para desplazamientos extensos, aunque renuncia a utilizarla debido a su negativa a aceptar la percepción de envejecimiento.
Los problemas de movilidad de Juan Carlos son recurrentes, habiendo sido sometido a varias operaciones de cadera con éxito, pero su cuerpo no ha recuperado su plenitud. Su apoyo constante en un bastón y en su leal personal de seguridad reflejan su situación actual.
A pesar de la distancia geográfica, los hijos de Juan Carlos mantienen un contacto regular con él y están al tanto de su estado de salud. Recientemente, han expresado su preocupación tras enterarse de que contrajo una gripe, aunque aseguran que no es motivo de gran alarma. Se rumorea que la infanta Cristina ha manifestado su interés y habría viajado a Abu Dabi por unos días.
Sin embargo, Cristina, Elena y Felipe están genuinamente preocupados por los lapsus cognitivos que está experimentando Juan Carlos. Los episodios, característicos de la demencia senil propia de la edad avanzada, son motivo de inquietud, ya que tienden a intensificarse con el tiempo. Aunque no se ha diagnosticado Alzheimer, se observan pequeñas lagunas que se agravan con el envejecimiento. Esta situación preocupa al rey, quien ha discutido en varias ocasiones con Letizia sobre la necesidad de traer de vuelta a Juan Carlos a España para cuidarlo de forma permanente. Si bien no puede regresar a Zarzuela, un lugar que le está vedado, se ha mencionado la posibilidad de Sanxenxo o incluso Portugal como ubicaciones cercanas. La infanta Elena ha ofrecido su piso como opción para cuidar de su padre.