Restaurante De la Riva, en Madrid. A cuatro pasos del estadio Santiago Bernabeú. Una taberna de comida casera (de lujo, eso sí) en la que los "Viva España", "Viva la Guardia Civil", el himno del Real Madrid, los cuadros de toreros e incluso, el del dictador Francisco Franco forman parte del ecosistema. El establecimiento muy activo (políticamente) en las redes sociales, donde podemos encontrar elogios a VOX, asquerosos ataques a Oriol Junqueras o mofas sobre Pedro Sánchez. Su cuenta en Instagram es una orgía ultra, así como las sobremesas, donde el griterío nacionalista español acompaña el "café, copa y puro" de sus parroquianos. Un templo de los fachas madrileños que presume, incluso, de ilustres comensales: El rey emérito, Juan Carlos I.
"Algo tiene el agua cuando la bendicen, observad la foto, todos sonríen. Viva España, Viva el Rey, Viva el Orden y la Ley... y Viva la Guardia Civil!!!!" Este es el texto que acompaña a la imagen subida por Pepe Morán, el amo del cotarro, al compartir una fotografía tomada hace un año y que (no sabemos por qué) acaba de subir a la red. Allí encontramos al monarca entusiasmado con el personal del establecimiento, reconvertidos en groupies de 'Juanito'. Lo que no sabemos es si su gozo atiende a la calidad de la cocina, a la amplía bodega del local o al inflamado ambiente ultra que allí se respira. Aunque, haciendo cálculos, la comida podría ser para celebrar la operación de rodilla a la que se sometió el 7 de abril de 2018. Sea como sea, la elección del establecimiento habla mucho (y nada bien) de las preferencias del Borbón.
@restaurantedelariva
@restaurantedelariva
Un templo de la nostalgia fascista, aparte de enemigo de cualquier inclinación alejada del "una, grande y libre", y dónde el agua "bendita" hace milagros: El de sacar de su tumba al dictador Franco y sentarlo al lado de su heredero. Una estampa carpetovetónica de la que el emérito ya no se esconde.