Las vacaciones de la familia real en el Palacio de Marivent de Mallorca tienen un gran ausente: Juan Carlos I. El rey emérito ha preferido hacer la guerra por su cuenta, mientras que Sofía, que recientemente ha sido noticia por sus viajes "desconocidos" a Grecia, ha conseguido reunir a todos sus nietos en Palma.

Mientras que los actuales monarcas pondrán hoy punto final a su estancia en Marivent para empezar las vacaciones "privadas", Juan Carlos I ha disfrutado unos cuantos días en la localidad gallega de Sanxenxo, considerada prácticamente su tierra de adopción.

Amigos, tranquilidad y vela

Allí disfruta de la compañía de los amigos, lleva una vida más tranquila (alejada del glamur y los lujos de Mallorca) y puede practicar la vela. El exmonarca tiene la intención de participar en el campeonato mundial de veleros clásicos a bordo del Bribón a finales de septiembre y entre el 19 y el 20 de agosto se celebra la regata de San Vicente en las Rías Bajas.

Escapada a Irlanda y visita a Saint-Tropez

Antes de las vacaciones gallegas, sin embargo, Juan Carlos I ha tenido otros destinos. Según informa LOC, cuando Felipe VI aterrizaba en Mallorca el pasado 26 de julio, el rey emérito se encontraba en Clonmellon, una pequeña villa irlandesa ubicada a una hora de Dublín. Juan Carlos acudió a un acto social como invitado de Allen de Jesús Sanginés-Krause, quien fue director de Goldman Sachs en España.

El mes de agosto lo empezó en un escenario bastante diferente: Saint-Tropez. En la Costa Azul todavía guarda un buen número de amigos, como la condesa Marina Cicogna. También aprovecha para salir a navegar y visitar establecimientos de lujo.

EFE

Así pues, este año Juan Carlos I no ha puesto un pie en Marivent, adonde sí acudió el año pasado y se dejó fotografiar por la prensa con miembros de su familia.