Juan Urdangarin, el miembro más enigmático de la Familia Real, ha decidido cambiar de aires una vez más. A pesar de haber encontrado una aparente estabilidad en Londres, el hijo mayor de la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin no se quedará en la capital británica ni tampoco regresará a España. Sorprendentemente, ha decidido vivir tres meses en Italia, manteniéndose así lejos del escrutinio público y de los recuerdos amargos de su pasado.
Nacido en un momento envidiable para sus padres, cuando Iñaki Urdangarin estaba en pleno auge de su carrera empresarial y la infanta Cristina centrada en sus obligaciones, Juan creció entre Estados Unidos y Suiza. La familia Urdangarin-Borbón llevó una vida discreta hasta que el escándalo del Caso Nóos estalló, cambiando sus vidas para siempre. Ahora, convertido en adulto, se enfoca en su carrera profesional junto a Alejandro Agag, marido de Ana Aznar.
Como sus hermanos, estudió en los centros más exclusivos de Ginebra, finalizando en el prestigioso Ecolint. Tras un año sabático dedicado a la cooperación en Asia, se matriculó en la Universidad de Essex para estudiar Relaciones Internacionales y Economía. Al concluir su etapa universitaria, vivió en diferentes ciudades europeas, finalmente estableciéndose en Londres. Sin embargo, ahora ha decidido emprender una nueva aventura lejos de la bulliciosa capital británica.
Cerdeña: Un refugio temporal
El trabajo de Juan Urdangarin le brinda una gran libertad, permitiéndole moverse por todo el mundo. El año pasado, se trasladó a Cerdeña por motivos laborales, pasando gran parte del verano en la isla italiana. Trabajó en Capo Teulada, al sur de Cerdeña, durante el Prix de carreras de la serie eléctrica, y este verano repetirá la experiencia, instalándose nuevamente en la isla por tres meses. Esta decisión no solo responde a su trabajo, sino también a su deseo de mantenerse alejado de la familia real.
Una decisión contundente
Este alejamiento no es casualidad. Juan, a diferencia de sus hermanos, no ha visitado a su abuela, la reina Sofía, en Marivent. Los recuerdos del caso Nóos y el bullying sufrido en la escuela han dejado cicatrices profundas. Es evidente que el hijo de Iñaki Urdangarin prefiere mantener una distancia prudente de los escándalos que han marcado su vida familiar. Y es que el caso Nóos no solo afectó a sus padres, sino también a él directamente. Desde pequeño, Juan tuvo que enfrentar el rechazo y la burla de sus compañeros. La situación se agravó tanto que su madre, la infanta Cristina, lo llevaba al psicólogo para ayudarlo a manejar el estrés y la ansiedad. Esta traumática experiencia ha influido en su decisión de mantenerse alejado de Madrid y de cualquier lugar de España que le recuerde esos difíciles años.
La decisión de Juan Urdangarin de pasar el verano en Cerdeña y no en España es una declaración clara de su intención de mantener su independencia y distancia de la familia real. Vive todo el año en el Reino Unido, excepto durante los veranos, cuando se instala en la isla italiana por motivos laborales y personales. Así, ha dejado claro que no tiene planes de volver a Madrid ni a ninguna otra ciudad española a menos que sea estrictamente necesario.