El príncipe Guillermo se encuentra en proceso de reintegrarse por completo a sus deberes reales en los próximos días, adoptando un enfoque que combina apariciones públicas con trabajo desde la comodidad de su hogar. La prensa británica coincide en que este retorno meticulosamente planeado de Guillermo tiene como objetivo armonizar sus compromisos con la corona y su papel de padre de una familia joven.
Durante las últimas semanas, el príncipe ha estado dedicando tiempo en Norfolk junto a su esposa e hijos, preparándose para lo que el diario 'Herald' ha etiquetado como "un simulacro de ser rey mucho antes de lo que podría haber imaginado". Sin embargo, mientras se prepara para este nuevo capítulo, surgen especulaciones sobre posibles planes adicionales para el futuro cercano de los príncipes de Gales, especialmente en lo que respecta a Kate Middleton
Un santuario para la recuperación de Kate Middleton
Y es que, tras un período de relativa tranquilidad en Norfolk junto a su esposo, el príncipe Guillermo, y sus tres hijos, Kate Middleton, la princesa de Gales, parece estar preparándose para un cambio significativo en su entorno. Según informa 'The Sun', la pareja real estaría considerando la posibilidad de renovar y ampliar un anexo poco conocido de ladrillo rojo junto a su residencia actual en Adelaide Cottage, en los terrenos de Windsor.
El propósito de esta renovación sería transformar la propiedad abandonada y en mal estado en un refugio clave para la recuperación de Kate, quien ha estado lidiando con desafíos de salud tras su diagnóstico de cáncer. Aunque la Familia Real ha encontrado refugio en Adelaide Cottage, esta propiedad de cuatro dormitorios podría resultar demasiado ajustada para todos sus miembros. Por otro lado, Anmer Hall, su casa rural en Sandringham, ofrece más espacio pero se encuentra más alejada de la escuela de los niños.
Desafíos financieros y logísticos
La ubicación ideal de Adelaide Cottage, cerca de la escuela Lambrook, ha llevado a la pareja a considerar la posibilidad de expandir el anexo vacante para acomodar mejor a la familia. Sin embargo, esta decisión se encuentra rodeada de desafíos financieros, ya que el príncipe Guillermo está consciente del escrutinio público sobre los gastos de la Royal Family, por lo que debería adoptar un enfoque cauteloso respecto a la financiación del proyecto. Según una fuente citada por 'The Sun', el anexo de ladrillo rojo contiguo a Adelaide Cottage podría convertirse en un santuario para Kate y su proceso de recuperación. Aunque el proyecto se encuentra actualmente en pausa mientras la duquesa se concentra en su salud, se están gestando planes para su puesta en marcha en el momento adecuado.
La propiedad anexa, que ha permanecido sin uso durante mucho tiempo, requeriría una renovación considerable antes de poder ser habitada. Sin embargo, se considera una parte integral del conjunto de la casa y se espera que juegue un papel vital en el proceso de recuperación de la princesa, proporcionándole un entorno sereno para gestionar las demandas de su tratamiento. A pesar de los desafíos financieros y logísticos que implica esta posible mudanza, la salud y el bienestar de Kate son prioritarios para el príncipe Guillermo y la Familia Real en su conjunto. Con el anexo de Adelaide Cottage como posible nuevo refugio, Kate Middleton podría encontrarse en un entorno más propicio para su recuperación.