La monarquía británica vive pendiente de un hospital por varios motivos de salud. Dos figuras tan relevantes como el rey y la princesa de Gales han pasado por el quirófano de The London Clínic: Carlos III por un agrandamiento de próstata, Kate Middleton por un problema abdominal que parece serio. La recuperación de la mujer del príncipe Guillermo será lenta; 2 semanas de posoperatorio y 3 meses más de baja. Un largo periodo en el que necesita calma, reposo, optimismo. Aparcar preocupaciones y mal rollos y centrarse en lo más importante. Desgraciadamente, está comprobando que no será así.
Un nuevo escándalo se acerca desde el horizonte mediático, desde la televisión. Un familiar de la princesa, el tío Gary, acaba de fichar por un programa de máxima audiencia, repercusión y número de oportunidades para armar un buen cacao. El 'Big Brother Celebrity', el equivalente del 'Gran Hermano VIP' de Telecinco. Los productores de la cadena ITV han conseguido tentarlo con una cifra lo bastante golosa. Una inversión que garantizará "oro televisivo", según el Daily Mail inglés. Es la gran estrella de la nómina de concursantes que habitará la casa a partir del mes de marzo, con su sobrina Kate viéndolo por televisión desde su casa convaleciente y con un miedo de mil demonios. ¿Por qué? Pues porque Gary es un peligro. No es la primera vez que la lía.
Celebrity Big Brother signs Kate Middleton's uncle Gary Goldsmith as insiders say show's 'most controversial' recruitment could be 'TV gold' https://t.co/oVa7D8V7Pk pic.twitter.com/UJhZDnBGl6
— Daily Mail Online (@MailOnline) January 27, 2024
El currículum de Goldsmith, de 58 años, tiene pasajes bastante inquietantes para la tranquilidad emocional de la princesa. Cuatro bodas, una agresión machista a una de ellas por la que fue condenado, vídeos esnifando cocaína de fiesta en Ibiza... Kate sabe que el hermanito de su madre Carole es un imán de pollos. Su peculiar forma de expresarse y hablar sin ambages ni filtros es una de sus características mediáticas. El contenido, también: como cuándo calificó a Enrique como "petulante y egoísta".
Entra al concurso y al barro para "defender el honor de los Middleton", a raíz de las polémicas memorias del hermano díscolo de Guillermo. El pitote por las acusaciones de racismo contra Meghan Markle y su hijo Archie, y que señalan presuntamente a los príncipes, le hicieron daño. No soporta a los cuñados royals, y "está ansioso" por entrar en la casa y empezar a repartir estopa. "Ha dejado claro que hablará de cualquier tema, y es lo bastante claro cuando se trata de los Sussex". Un pirómano, vaya. No le hará ningún favor, mejor no remover los estercoleros. Eso sí, se llevará una buena pasta. Al final, se trata de eso. Kate pasará del posoperatorio a la consulta del psicólogo. Gracias, tío, por el regalo.