En una jornada que se esperaba con ansias, Kate Middleton, la princesa de Gales, reapareció en un acto oficial, justo un día después de anunciar su regreso tras meses de ausencia. Esta vez, la ocasión era el Trooping the Colour, el cumpleaños oficial de su suegro, el rey Carlos III, pero toda la atención estaba inevitablemente centrada en ella. Tras anunciar a principios de año que estaba luchando contra el cáncer, los medios y el público estaban ávidos de ver cómo enfrentaba esta nueva etapa de su vida.
Kate Middleton, siempre impecable en sus apariciones públicas, no decepcionó. Lució un estilismo impecable que evocaba la elegancia atemporal de la época dorada de Hollywood, con un conjunto blanco con detalles en negro. Sin embargo, no fue su atuendo lo que acaparó la mayor atención, sino su característica melena castaña.
Acompañada por el príncipe Guillermo y sus tres hijos, Kate saludó a los miles de curiosos que se agolpaban para verla. En su mano brillaba el icónico anillo de zafiro de Lady Diana, un símbolo de continuidad y fortaleza. Pero lo que muchos no podían dejar de notar era su peinado: un recogido en moño con un tocado que, según los expertos, ocultaba una realidad impactante.
La verdad detrás del peinado de Kate Middleton
La estilista Anitta Ruiz fue la primera en levantar la sospecha: ¿podría Kate estar usando una peluca? La respuesta llegó de la mano de Concha Calleja, quien confirmó lo que muchos temían: la princesa de Gales se ha quedado sin pelo y llevaba una peluca. Es una consecuencia de la quimioterapia a la que se está sometiendo desde su diagnóstico de cáncer, explicó Calleja en el programa 'Fiesta'.
Según Calleja, aunque existen métodos para intentar evitar la caída del cabello durante la quimioterapia, como los cascos de frío, Kate no los ha utilizado. “Hoy llevaba una peluca que llevaba el moño incorporado ya hecho, y tiene varias pelucas preparadas para sus próximas apariciones", añadió.
La estilista Anitta Ruiz también analizó detenidamente la nueva apariencia de Kate Middleton. Señaló que, aunque la princesa se movía con independencia, sus gestos eran lentos y pausados, y su pérdida de peso era evidente. Además, ha utilizado extensiones de cejas para compensar la pérdida de pelo en esa zona. “Es algo poco conocido, nos suela más lo de las extensiones de pestañas, pero esto también se usa", explicó.
La importancia de la imagen pública en medio de la enfermedad
Estos detalles estilísticos no son solo una cuestión de vanidad, sino una estrategia para mantener la imagen de fortaleza que la futura reina de Inglaterra debe proyectar. Y es que, es claro que Kate Middleton, a pesar de su enfermedad, está decidida a mantener su imagen pública intacta. Su aparición no solo busca mostrar que sigue siendo una figura de estabilidad para el pueblo británico, sino también evitar que su vulnerabilidad se convierta en motivo de preocupación. Sin embargo, es evidente que su bienestar sigue siendo una prioridad. Durante la celebración, Kate no estuvo de pie durante mucho tiempo y siempre tenía a su personal médico cerca. Esto subraya la importancia de su recuperación, incluso mientras cumple con sus obligaciones públicas.