Lady Di fue una de las mujeres más queridas y admiradas del mundo, sin embargo, a pesar de hacerse famosa por ser incluida en la familia real británica, desde que contrajo matrimonio con el príncipe Carlos, experimentó la peor etapa de su corta vida. De acuerdo con la teoría explicada por el sitio web de Mujer Hoy, se ha revelado que Lady Di tenía problemas de adicción al romanticismo junto cuando contrajo nupcias con el actual rey del Reino Unido.
La princesa Diana, intoxicada por el romanticismo
Hoy en día ha salido a la luz un testimonio gráfico de que la joven Diana Spencer adoraba las novelas rosas de Barbara Cartland. En realidad, las devoraba en su habitación de Althorpe House, según el citado medio. Nos referimos a la versión más intensamente romántica, fantasiosa y tóxica del género que existió en su era dorada, cuando las novelas de la escritora y de Jazmín, Bianca o Violeta se vendían como pan caliente.
La especialidad de Barbara Cartland, fallecida en 2000, era el romance de época entre una joven invariablemente pura y virgen y un militar de alta graduación, vizconde, lord o príncipe ya en la treintena. Lo habitual es que él luchara contra sus sentimientos por la balbuceante doncella, la salvara de algún apuro o lance mortal y terminaran declarándose amor verdadero y besándose. Todo muy light, pero con una intensidad romántica tan desaforada, que hoy se leería como terror. Es por ello que no es de extrañar que Diana Spencer se perdiera en un mundo de fantasías cuando decidió aceptar casarse con el príncipe Carlos, intoxicada por la ilusión de vivir un cuento de hadas, tal como el que la escritora describía en sus textos.
Boda de Lady Di y Carlos III
La boda de Lady Di con el príncipe Carlos de Inglaterra en 1981 fue un evento mediático de proporciones épicas. La joven princesa, de 20 años, era una de las mujeres más bellas y carismáticas del mundo, y su matrimonio con el heredero al trono británico parecía ser un cuento de hadas. Sin embargo, la realidad del matrimonio fue muy diferente. Carlos y Diana eran personas muy diferentes, y su relación estaba plagada de problemas desde el principio. El hijo de la fallecida Isabel II estaba enamorado de Camilla Parker Bowles, una mujer con la que había tenido una relación antes de casarse con Lady Di. Ella, por su parte, se sentía sola y aislada en la familia real.
En 1992, Carlos y Diana anunciaron su separación. El divorcio se finalizó en 1996, y ella quedó libre para comenzar una nueva vida. Sin embargo, la sombra de su matrimonio con siempre la persiguió. El 31 de agosto de 1997, Diana murió en un accidente automovilístico en París. La causa oficial de la muerte fue un traumatismo craneoencefálico. La muerte de Lady Di fue un evento trágico que conmocionó al mundo. La princesa se convirtió en una figura popular y querida gracias a su carisma y cercanía con el pueblo.