Nuevo problemas para Leonor en la travesía. En los últimos días se difundieron las imágenes de las cámaras de un centro comercial donde se podía ver a la princesa con unos compañeros. Estas fotografías pertenecen a la intimidad y privacidad de la hermana de Sofía, como cualquier otra persona, por ello Casa Real ha tomado medidas drásticas contra el establecimiento y la persona que habría difundido las imágenes. La semana pasada también hubo una persona anónima que la fotografió de fiesta con una cerveza en la mano en un pub de Punta Arenas, en Chile.

No es la primera vez que aparecen imágenes privadas de Leonor en estos dos meses. En Brasil se la pudo ver en una fiesta de carnaval con un compañero con el que derrochó mucha complicidad, algunos medios de comunicación aseguraron que se trataba de su nueva pareja. En Uruguay se habló de unas fotografías de la princesa tomando el sol en bikini en una playa, que parece que Zarzuela pudo frenar a tiempo.
Pero además, Leonor está viviendo una travesía complicada. Sin duda está siendo la peor experiencia de su vida. A diferencia de sus compañeros, ella no estaba preparada para esta misión. Se adaptó su formación militar en los tres ejércitos en tres años. Para ella en el buque escuela Juan Sebastián Elcano todo era nuevo. La hermana de Sofía sufrió fuertes mareos y vómitos en los primeros días, tuvo que ausentarse de clase y confinarse en su camarote. De hecho, el equipo médico a bordo le recetó biodramina para que pudiese continuar con su formación. También recibió un fuerte golpe por el oleaje mientras realizaba la guardia en cubierta, de ahí los moretones de sus brazos.
Letizia planea que Leonor esté presente en el cumpleaños de la infanta Sofía
Letizia está muy preocupada por Leonor y muy enfadada con las fotografías que se van publicando. Ha discutido nuevamente con Felipe VI, cree que se están superando todos los límites y debería volver a casa. Se desconoce si finalmente estará presente para el cumpleaños de su hermana Sofía, cumple la mayoría de edad y se quiere celebrar una fiesta familiar en El Pardo como se hizo con la princesa.
Es la excusa perfecta para que Leonor descanse de la travesía, y para que no vuelva más a la embarcación hasta los últimos días, en los que llegarían a Galicia. La princesa ha llamado a sus padres llorando en más de una ocasión, nunca la habían visto así, y la reina no quiere tener a su hija tan lejos y encima sin comunicación cuando está navegando.
